Solchaga señalóasimismo que, entre enero y agosto de este año, la recaudación obtenida por la Inspección Tributaria se elevó a 237.000 millones de pesetas, por lo que, a fin de año, superará ampliamente lo ingresado en todo el 91, que fueron 245.000 millones.

En el 93, las inspeciones afectarán a 72.825 contribuyentes. Hacienda hará especial hincapié en los empresarios autoempleados como gerentes en sus empresas y en los profesionales. De este último colectivo, recibirán la visita de la inspección 1.250.

Asimiso, la Agencia tributaria inspeccionará a 300 grandes empresas con un volumen de operaciones superior a los 4.000 millones de pesetas, y otras 2.450 con facturaciones superiores a los 1.000 millones.

Solchaga anunció también que el Gobierno modificará la normativa vigente a fin de poder imponer "fuertes sanciones" a quienes vendan tabaco de contrabando y no sólo a quienes lo introduzcan ilegalmente en España, como ocurre ahora.

A su juicio, esta es la única manera de cortar este tráfico, puesto qu se ha llegado al absurdo de que los consumidores pagan más por el tabaco de contrabando, libre de impuestos, que por el legalizado, fenómeno que Solchaga atribuyó a la "parafernalia del mimetismo de los españoles en los consumos extranjeros".

Otra novedad fiscal anunciada por el ministro es la introducción, todavía en estudio, de algún tipo de penalización tributaria a quienes mantengan inmovilizado y sin uso casas o solares, con el objetivo de luchar contra la especulación inmobiliaria.

Sin embrgo, afirmó que no tiene en cartera ninguna modificación de la fiscalidad del capital mobiliario, lo que implica que el Gobierno no piensa suprimir la favorable tributación de que gozan los fondos de inversión, a pesar de la pérdida de impuestos que le está suponiendo.