Costa admitió ante la Comisión de Economía y Hacienda que la recaudación por actas de inspección sobre expedientes de cuantías menores ha caído entre enero y mayo a 164.630 millones de pesetas, unos 57.000 millones menos que en el mismo periodo del año pasado. A cambio, explicó, la inspección ha aflorado delitos fiscales por importe de 73.198 millones, 62.000 más que el año pasado.

Con estas cifras, el responsable de Hacienda rechazó las críticas que los subinspectores fiscales y algunos artidos de oposición vienen haciendo sobre la mala gestión de la Agencia Tributaria y la caída de la recaudación por persecución del fraude.

Además, el secretario de Estado anunció la creación de varias unidades de inspección que estarán especializadas en la persecución integral de delitos fiscales por parte de "grandes grupos económicos".

Informó que la Agencia Tributaria cuenta ya con 6 unidades piloto de este tipo, a las que se les ha dado un periodo de prueba de seis meses para conocer su efetividad, y dijo que la reforma del IRPF contribuirá a mejorar esta estrategia, ya que la caída del número de declaraciones a tramitar permitirá liberar personal dedicado a la gestión del impuesto para destinarla a las unidades antifraude.

Para ilustrar esta estrategia de Hacienda, su responsable dijo que, entre enero y mayo, la recaudación de estas actas ha sido de 164.630 millones de pesetas, 57.000 millones menos que en el mismo periodo del año pasado. A cambio, las inspecciones de delitos fiscales,es decir, de las infracciones más importantes, han aflorado en el mismo tiempo 71.198 millones de pesetas. 62.000 millones más que en el mismo periodo del año pasado.

Como consecuencia de esta marcha de la actividad de control de Hacienda, la deuda total recaudada hasta mayo asciende a 419.744 millones de pesetas, un 5% más que en el mismo periodo de 1997.

Además, Costa explicó que la Agencia Tributaria está haciendo un esfuerzo por sacar adelante los expedientes de inspección de años anteriores,para evitar que se se produzcan vencimientos de los periodos legales para exigir las cantidades adeudadas a a Hacienda.

Por este concepto, dijo el secretario de Estado, una parte importante del personal de la Agencia Tributaria se ha dedicado a liquidar deuda instruida en ejercicios anteriores, lo que ha hecho caer el dinero pendiente de cobro de años precedentes en unos 80.000 millones de pesetas.