LOS GUARDIAS CIVILES ACUSADOS DE PAGAR CON DROGA A CONFIDENTES SE DEDICARON TAMBIEN A LA REVENTA DE ESTUPEFACIENTES

MADRID
SERVIMEDIA

Los seis guardias civiles de la Unidad Central de Investigación Fiscal y Antidroga (UCIFA) acusados de realizar pagos con droga a confidentes realizaron tareas de receptación, favorecimiento del tráfico de estupefacientes y venta de drogas, según informaron hoy fuentes cercanas a la investigación.

Esta mañana prestó declaración en la Audiencia Nacional uno de los últimos detenidos, el cabo Nazario Cifuentes, que comparecerá de nuevo mañana en el juzgado junto al también cabo Félix Molina, mientras que el juez Garzón ha decretado orden de detención contra otros cuatro guardias civiles (un sargento, dos cabos y un agente) en Madrid.

Según las mismas fuentes, los agentes son investigados por delitos de tráfico de estupefacientes, falsedad documental, allanamiento de morada, tenencia ilícita de arms y sustracciones de armas y dinero en los registros que efectuaban.

De acuerdo con una información difundida por la cadena Ser, los guardias implicados en el pago irregular adulteraban la droga restada de los alijos y la mezclaban con otras sustancias para tratar de disimular la cantidad con la que se quedaban.

Asimismo, las diligencias practicadas, que permanecen bajo secreto de sumario, han permitido averiguar que los agentes destruyeron grabaciones de algunas conversaciones telefónicas mantendas con los futuros confidentes, en las que les ofrecían diversas cantidades de sustancias a cambio de su colaboración.

Hasta el momento son 12 las personas detenidas por estos hechos, que comenzaron a ser investigados en septiembre de 1991 a raíz de las denuncias efectuadas por un guardia arrepentido, Vicente Domínguez Serrano.

El juez ha ordenado el ingreso en prisión del comandante José Ramón Pindado, el sargento Gonzalo Méndez y los guardias Vicente Domínguez y Doroteo Gómez, así como de los onfidentes Ramón del Temple, José Luis Recuero del Pino, José Manuel García Gutiérrez y Luis Ezquerecocha, mientras que otros dos, Ricardo Fernández Barudo y Juan Payol, quedaron en libertad bajo fianza.

La operación continúa abierta, mientras Baltasar Garzón estudia los documentos incautados en la madrugada de ayer en la Dirección General de la Guardia Civil, que en su mayoría constituyen atestados efectuados por los guardias en las operaciones de aprehensión de drogas, para tratar de contabilizar eltotal de la cantidad restada por los agentes implicados en el caso.

Según las mismas fuentes, Garzón no descarta la posibilidad de efectuar nuevos requerimientos al director del cuerpo, Luis Roldán, conforme avancen las investigaciones.

(SERVIMEDIA)
15 Dic 1992
C