López Valdivieso calificó esta operación como "la másimportante realizada en España para combatir la entrada ilegal de tabaco", ya que entre un 25 y un 35 por ciento del tabaco de contrabando que llega a nuestro país procede del Principado.

Además, el director general de la Guardia Civil anunció que se preparan otras dos operaciones similares en Galicia y el Estrecho de Gibraltar, donde el contrabando de tabaco también representa un suculento negocio. Aunque no precisó el volumen exacto que llega por estas vías, indicó que es menor que el que se registr a través de la frontera andorrana.

López Valdivielso explicó que la "Operación Montaña" comenzó el pasado mes de julio al detectarse que se había modificado sensiblemente la forma de operar de los contrabandistas, que habían pasado del contrabando tradicional a transformarse en "verdaderas redes de contrabando industrial".

Según los datos facilitados por el director general de la Guardia Civil, el Principado de Andorra importa un total de 223 millones de cajetillas de tabaco rubio, de las cuales74 millones se venden legalmente a los turistas que visitan el país y el resto, 150 millones de cajetillas, salen ilegalmente de Andorra cada año.

Diariamente, el volumen de cajetillas de contrabando asciende a 425.000 cajetillas, lo que supone una cifra de negocio cercana a los 50.000 millones de pesetas anuales.

De acuerdo con las mismas fuentes, el daño que supone para la Hacienda Pública española este negocio ronda los 45.000 millones de pesetas anuales, ya que el 70 por ciento del valor de ua cajetilla son impuestos.

La "Operación Montaña", coordinada por la Guardia Civil, comenzó el pasado mes de julio. En la primera fase, se desplazaron guardias y oficiales hasta la frontera entre LLeida y Andorra para localizar las rutas de paso de los contrabandistas, las zonas donde almacenaban los alijos y los almacenes.

COLABORACION DE LA GENDARMERIA

Además, se enviaron grupos especiales para los trabajos de información e inteligencia y para localizar las zonas donde se iban a establecer lo puestos de controles fijos de paso y las unidades móviles de localización. En la operación colaboró también personal de Aduanas del Ministerio de Hacienda, la Embajada de España en Andorra, miembros de la Gendarmería francesa y efectivos de la UCLAF (Oficina Europea para el fraude y contrabando comunitario).

El 29 de septiembre comenzó la "fase de choque", con los Grupos de Acción Rural (GAR). Se cerraron todos los pasos a través de pistas forestales y se incrementó el control de paso de vehículos po las aduanas desde Andorra hasta la provincia de LLeida, con especial atención sobre la aduana de Farga de Moles.

En la operación, que continúa abierta y que estará en marcha por tiempo indeterminado, según confirmó López Valdivieso, han participado también tres helicópteros del cuerpo.

Desde que se puso en marcha la "fase de choque", según los datos facilitados por el director general de la Guardia Civil, se han reducido en un 175 por ciento los delitos en esa zona, se han disparado un 235 por cento la incautación de vehículos (principalmente todoterrenos), se han elevado un 216 por ciento las aprehensiones de tabaco en la aduana y se han incrementado las detenciones un 300 por ciento.

López Valdivieso no quiso precisar el número exacto de contrabadistas detenidos, aunque sí explicó que la mayoría de los detenidos son de nacionalidad portuguesa, de países del Este, españoles y franceses, y dijo que "posiblemente" hay algún "capo" de las mafias de contrabando organizadas entre los detenidos. Entre los logros de esta operación, el máximo responsable de la Benemérita destacó el bloqueo de la frontera, la coordinación con el Servicio Fiscal y la eliminación del contrabando industrial en la frontera entre España y Andorra.