Según informó este martes el Instituto Armado, tras la recepción oficial de estas armas, que se espera para las próximas semanas, se someterán a una serie de pruebas para evaluar su rendimiento operativo y definir los procedimientos de empleo.

Concluidas estas evaluaciones, se formará y habilitará al personal de aquellas unidades entre las que se va a distribuir este primer lote. A partir de la experiencia en estas unidades, se procederá a extender de manera progresiva a otras unidades.

Las pistolas Táser constituyen un nuevo medio que se integra en el esquema de intervención operativa de la Guardia Civil. El Sistema de Intervención Operativa se implantó en 1998 y se basa en el uso gradual de la fuerza.

La Benemérita destacó que "el objetivo final del sistema es mejorar de manera constante la operatividad de los guardias civiles, garantizando la seguridad en sus intervenciones".

El equipamiento de estos nuevos dispositivos no letales incorpora un sistema de grabación de la actuación que permite documentar gráficamente las intervenciones en las que se utilicen, para garantizar la seguridad jurídica del personal del Instituto Armado en sus actuaciones.