Despúes de haber conseguido gran parte de sus demandas, Greenpeace pone así fin a tres días de protesta contra la importación de madera procedente de la destrucción de los bosques africanos.

Representantes de la oficina de Greenpeace España mantuvieron una reunión con el subdelegado provincial del Gobierno en Pontevedra, Alejandro Millán, y las autoridades del puerto de Vilagarca, donde se encontraba ayer el barco.

Como resultado de estas reuniones, Millán acordó realizar un examen severo de la carga de madera tropical africana, que permanecerá en el puerto de Vilagarcía a la espera de las indagaciones que llevarán a cabo el Servicio de Aduanas y el servicio encargado del control del Convenio CITES (Convenio Internacional sobre el Comercio de Especies de Flora y Fauna Amenazadas).

Millán apoyó también la celebración de una reunión con el ministro de Medio Ambiente, Jaum Matas, para discutir el papel de España en la importación de madera y productos de madera procedente de la explotación en Africa y el resto de los bosques primarios del mundo.