GREENPEACE ATRIBUYE EL DESPRENDIMIENTO DE UNA PLACA ANTARTICA AL CAMBIO CLIMATICO

MADRID
SERVIMEDIA

La organización ecologista Greenpeace atribuyó hoy el desprendimiento de un bloque del banco de hielo antártico, denominado Larsen B, al cambio climático, y dvirtió que este episodio debería servir para que los distintos gobiernos tomen conciencia de los efectos que tendrá en el planeta el aumento de las temperaturas.

El bloque que se ha desprendido tiene unas dimensiones aproximadas de 40 kilómetros de largo, casi como la isla de Menorca, y 5 de ancho. La superficie total del Larsen B es de 12.000 kilómetros cuadrados.

Greenpeace ya advirtió el año pasado del riesgo de desprendimientos en este banco de hielo, tras realizar una expedición por la Antátida con el barco "MV Arctic Sunrise", que le permitió documentar las grandes grietas que presentaba ya entonces el bloque de hielo.

Según la organización internacional, desde la década de los cuarenta, las temperaturas han aumento una media de 2,5 grados centígrados en la Antártida, lo que está provocando una disminución de los bloques de la masa de hielo en el polo sur.

A pesar de estas evidencias, los ecologistas denuncian que desde la 'cumbre' sobre cambio climático que se celebró en Kioto (Jpón) el pasado mes de diciembre, los gobiernos apenas han hecho nada para inciar la progresiva eliminación de los combustibles fósiles, ya que son los principales responsables del cambio climático, debido fundamentalmente a las emisiones de CO2.

Martin Krueger, portavoz de Greepeace Internacional, señaló que, por el contrario, los distintos países han actuado "como si no pasara nada, mientras por todo el mundo se suceden las noticias de extraños fenómenos meteorológicos relacionados con el cambio climtico".

Krueger afirma que si no se toman medidas, "estaremos provocando que la subida de temperaturas y el cambio climático sobrepasen el límite al que las especies se puedan adaptar".

La organización ecologista acusó a las grandes compañías petroleras, como BP y Shell, de seguir buscando nuevos yacimientos de petróleo, carbón y gas, a pesar de estas evidencias.

El año pasado Greenpeace documentó los impactos del cambio climático en todo el planeta, desde la fusión de los glaciares árticos yel peligro que ello entraña para los osos polares por la reducción de la cubierta de hielo, hasta el aumento de la desertificación en Túnez o los temporales en el Mediterráneo.

En 1995, un bloque de hielo menor que el Larsen B, denominado Larsen A, se desintegró completamente durante una simple tormenta, tras disminuir gradualmente durante varios años.

(SERVIMEDIA)
18 Abr 1998
GJA