Para greenpeace, la posición de EEUU es "lamentable", ya que el anuncio de Clinton "es una traición a sus propias promesas y demuestra que las decisiones importantes están controladas por las multinacionales de la energía sucia".

Por otra parte, el colectivo ecologista acusó a EEUU de ser responsable el 23% de las emisiones de dióxido de carbono, considerado el gas causante del cambio climático.

En la Cumbre de Río de Janeiro de 1992, recuerda Greenpeace, George Bush, el entonces presidente de EEUU, se comprometió a estabilizar las emisiones de CO2 en el año 2000. Sin embargo, "este compromiso ha sido incumplido y las emisiones de gas invernadero en ese país continúan aumentando y ahora Clinton anuncia que éstas se estabilizarán en el año 2010".