GREENPEACE ADVIERTE AL GOBIERNO DE QUE NO RECURRA A LAS MASAS VEGETALES COMO SUMIDEROS DE CO2
- Los incendios forestales y la desertización merman la capacidad de los bosques españoles para frenar el cambio climático, según los ecologistas
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Greenpeace ha advertido al Gobierno español de que no debe recurrir a las masas vegetales como sumideros de CO2 y de que lo que tiene que hacer es reducir sus fuentes de emisión, ya que duplicn el límite del Protocolo de Kioto.
La organización ecologista ha realizado un primer análisis de la capacidad de los ecosistemas forestales españoles para actuar como sumideros de CO2 y ha llegado a la conclusión de que esta capacidad se ve seriamente limitada por problemas como los incendios forestales, la desertización del suelo y las condiciones climáticas del área mediterránea.
Greenpeace considera que sería un error que los gobiernos hagan uso de la "trampa" de descontar de sus obligacionesde reducir emisiones de CO2 la parte que eventualmente haya sido absorbida por las masas vegetales, a pesar de que el acuerdo de Bonn permita hacerlo.
Según la organización ecologista internacional, España no tiene más alternativa que reducir el consumo de combustibles fósiles, ya que las emisiones de gases de efecto invernadero en 1999 superaban ya en un 23-27% el nivel de 1990, mientras que el Protocolo de Kioto obliga a no emitir más de un 15% en 2008-2012 respecto a 1990.
"La necesaria conseración de los bosques no debería emplearse como excusa para eludir la obligación de reducir las fuentes de emisión de CO2, que son la quema de combustibles fósiles en centrales térmicas y coches", afirmó Miguel Angel Soto, responsable de la Campaña de Bosques de Greenpeace. "Sería un grave error hacer descansar la estrategia frente al cambio climático en las masas forestales, lo que iría en contradicción de la propia Estrategia Forestal Española".
Según Greenpeace, los incendios forestales ocurridos enEspaña en el periodo 1990-2000, en los que ardieron 700.000 hectáreas de superficie arbolada, podrían haber emitido a la atmósfera unos 70 millones de toneladas de CO2, teniendo en cuenta que los bosques acumulan entre 100 y 200 toneladas de CO2 por hectárea.
Por lo tanto, la organización recuerda que del CO2 absorbido por los bosques habría que descontar el emitido en los incendios, que en pocos días pueden liberar el CO2 acumulado durante años.
(SERVIMEDIA)
26 Jul 2001
CAA