González, rompiendo la línea marcada desde su llegada a Colombia de no hacer declaraciones a la prensa española, mantuvo dos ruedas de prensa en el último día. El segundo encuentro con el presidente sirvió para matizar y confirmar lo manifestado horas antes en su primer contacto informativo.

El presidente reconoce que su actitud puede dar una imagen de indiferencia ante la opinión pública española muy similar a la del entrenador que no mueve el baquillo cuando va perdiendo, pero señaló que "introducir cambios permanentemente, con reacciones histéricas, da una imagen peor. Ya ha habido alguna experiencia en este sentido de equipos que han cambiado de entrenador ocho, nueve o diez veces y casi baja el equipo a segunda división", afirmó.

Felipe González no se siente rehén de Jordi Pujol. "Tres cuartas partes de los gobiernos del mundo gobiernan con apoyos complementarios", dijo antes de reconocer que intentará hablar con el presidente de la Generlitat lo antes posible. De hecho, González ha adelantado su viaje de regreso a España ante la eventualidad de mantener la conversacioón que tiene pendiente con Pujol.

El presidente insistió en que su Gobierno seguirá adelante. "Tomaremos las decisiones que nos correspondan con el mismo apoyo parlamentario con el que contábamos antes de las elecciones del día 12. El bache se va a superar. Nuestra obligación será recuperar una parte del electorado que se nos ha ido a la abstención o a otras partes", decaró.

González tuvo palabras tranquilizadoras para el mundo de la economía y las finanzas. "Los mercados han de estar tranquilos porque tienen que saber que va a haber estabilidad económica, que ya está permitiendo iniciar la recuperación con una cierta fuerza".

Respecto a la posibilidad de que José María Aznar le proponga en los próximos días un pacto de Estado, el presidente calificó de positivo que haya más diálogo, pero "la responsabilidad de gobernar", afirmó, "será del Gobierno en cualquier ircunstancia. Si no se puede asumir, el Gobierno tendrá que tomar otras decisiones, pero no cederá su responsabilidad".

Felipe González insistió en que una cosa es el Gobierno y otra el partido. "He visto que ha habido declaraciones de algunos compañeros, pero no les concedo mayor importancia. El partido creo que será respetuoso y apoyará al Gobierno con firmeza".