Vivienda
El Gobierno vasco planteará que los ayuntamientos puedan rebajar del 75% al 60% el mínimo de viviendas de protección oficial
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El Gobierno vasco prepara una reforma materia de vivienda en la que contempla la flexibilización de los porcentajes de vivienda protegida en suelo urbanizable, para que pasen del 75% actual a un mínimo del 60%, según anunció este miércoles en el ‘Fórum Europa. Tribuna Euskadi’ el consejero de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco, Denis Itxaso.
En su intervención en este desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Bilbao, Itxaso defendió que el País Vasco es líder en la protección del parque público de vivienda e incluso con esta reducción “seguirán siendo campeones del mundo”.
Itxaso aseveró que la medida, que pretende tramitarse en sede parlamentaria a través de una proposición de ley de los grupos de PNV y PSE, será voluntaria y se aprobará mediante pleno en aquellos ayuntamientos que “demuestren y razonen que tienen problemas”. “Cuando ese suelo no se moviliza, termina convirtiéndose en cero viviendas protegidas y en cero viviendas libres”, agregó el consejero para explicar esta propuesta.
Con esta flexibilización de los criterios urbanísticos, se permitirá que los municipios ajusten los porcentajes de vivienda libre y protegida en suelo urbanizable para garantizar la viabilidad de cada operación. Itxaso calculó que el País Vasco cuenta con suelo para albergar “60.000 viviendas protegidas”, pero los procesos se encuentran parados y “eso no es progresista”.
El consejero admitió que “nadie se ha hecho rico haciendo vivienda protegida” y que no puede “decir a ningún sector que pierda dinero”, pero pidió a los constructores que en esta tarea tiene que ganar la sociedad.
Además, el consejero recordó que también es necesaria la vivienda libre “para satisfacer las necesidades de una clase media que en Euskadi es bastante robusta”, y que se están aspirando a vivienda protegida “porque no hay vivienda libre”.
A eso se suman factores demográficos, con una prolongación de la esperanza de vida que hace que los pisos estén ocupados por sus propietarios o inquilinos durante más tiempo. “La gente ya no hereda la casa de sus padres, heredará la de sus abuelos”, apuntó. Asimismo, señaló que en los últimos tiempos se ha producido un incremento de los hogares, y por tanto una reducción de la oferta, porque “cada vez más gente vive sola”.
(SERVIMEDIA)
05 Mar 2025
NFA/pai