“Lo que el Gobierno espera es recuperar consensos básicos”, afirmó la ministra de Política Territorial y portavoz, Isabel Rodríguez, cuando se le preguntó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre la reunión que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tendrá este jueves con el nuevo líder de la oposición.

Así las cosas, subrayó que “lo que se demanda" es que el Gobierno “se pueda entender con el principal partido de la oposición” y, de ahí que “el objetivo del Gobierno en esta primera reunión con Feijóo es recuperar consensos básicos” entre los que incluyó “el cumplimiento de la Constitución”.

De esta manera señaló la portavoz que en la cita se abordará la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras más de tres años de mandato caducado, además del respaldo del PP al plan de choque, de un monto de 16.000 millones de euros. “No es un mal parche”, respondió Rodríguez, tras las críticas de Feijóo a ese plan.

Además, indicó que en el Ejecutivo “claro” que están “abiertos a la escucha” porque este es un plan “especial”. Aun deseando que “no fuera necesario” prorrogarlo porque la guerra concluya, la portavoz afirmó que se podrá tramitar como proyecto de ley.

BAJADA DE IMPUESTOS

Ante las afirmaciones de Feijóo de que el Gobierno no ha cumplido con lo firmado en la declaración de La Palma, la portavoz subrayó que “claro que hemos cumplido” tras leer partes del texto que ella misma aseguró que había redactado. Y lo acompañó de explicaciones sobre los impuestos adoptadas por el Ejecutivo como la rebaja fiscal en la factura energética.

En el Gobierno se están esmerando, señalan fuentes gubernamentales, en ir “de buenas” a la reunión del jueves entre los dos líderes y con la “voluntad” de llegar a acuerdos, porque entienden que es el momento de practicar lo que predican.

Así las cosas, consideran que el cierre total de un acuerdo entre Sánchez y Feijóo sobre la renovación del CGPJ no se va a dar el mismo jueves, pero que es “fácil” que ambas partes puedan mostrar voluntad de entendimiento con gestos, como, por ejemplo, hablar de equipos negociadores.

Desde La Moncloa defienden que al tratarse de un primer encuentro conviene no fijar un orden del día y que tanto Sánchez como Feijóo aborden los temas que consideren. Así, desde el Ejecutivo aseguran que el presidente llevará actitud de escucha sobre las propuestas del líder para el plan del choque, pese a que, recuerdan, los populares solo recetan bajadas de impuestos.

En este sentido, desde el Ejecutivo se rebate la acusación de Feijóo sobre el incumpliento del acuerdo en La Palma que el mismo presidente de la Xunta negoció con la ministra de Política Territorial. Aseguran desde el Gobierno que Feijóo no logró el acuerdo que a él le hubiera gustado, de concretar qué impuestos se podían modificar, pero apostillan que al final se acordó una redacción y el acuerdo se firmó por parte de todos los presidentes.

ACUERDO CONTRA VOX

Sobre cómo debe ser la relación con Vox y si los dos principales partidos en España deben actuar conjuntamente y establecer un cordón sanitario, la portavoz insistió en que quieren “recuperar los consenso básicos para este país” y, para ello, “es importante no ponernos ningún límite en ampliar, recuperar todos esos consenso, e incluso abrir un poco el prisma y la perspectiva y no cerrarnos solo a lo que ocurre en nuestras fronteras”.

"Llevamos toda la mañana hablando de cuestiones de contexto internacional y, por tanto, y para referirnos a pactos con la extrema derecha", dijo, no habría que escuchar la posición del Gobierno sino que al PP le debería bastar con escuchar la opinión del presidente del Partido Popular Europeo "con respecto a estos pactos”, afirmó cuando se le preguntó por la relación que debe aplicar el PP con la formación de Santiago Abascal, en alusión a las palabras de Donald Tusk desaprobando el pacto en Castilla y León.

“Lo importante en ese avance, en esa recuperación de consenso básicos, es que los partidos democráticos en España nos comprometamos a combatir los riesgos de la extrema derecha en un contexto de ataque a los principios básicos y democráticos de la Unión Europea”, remachó.