Tras la reunión del Consejo de Ministros, dedicada en su mayor parte al análisis de la crisis en Oriente Próximo, la ministra señaló que pese al cambio de las previsiones inicialmente fijadas sobre la duración de la conflagración militar, el Ejecutivo "no prevé ningún cambio" en la participación española en la crisis.

Rosa Conde precisó que España mantendrá sus compromisos adquiridos con la colición multinacional en virtud del mandato de las resoluciones de la ONU y de la directiva de la Unión Europea Occidental (UEO).

En caso de que Turquía sufra un ataque de Irak, el Gobierno apuesta por que sea la coalición multinacional la que intervenga, aunque recordó que el Tratado de Washington de la Alianza Atlántica obliga a mostrar "solidaridad" con un país miembro en caso de ataque.

Entretanto, la flotilla naval española desplazada a la zona continuará sus tareas de control al embargo conta Irak, escolta a los buques que transitan por la zona y apoyo logístico y humanitario a los países implicados directamente en la guerra.

La Portavoz del Gobierno aseguró que desde que comenzó el conflicto armado, en la madrugada del día 17, los efectivos españoles no han tenido que intervenir en ningún incidente relacionado con el embargo.

Tampoco ha sido preciso prestar ayuda humanitaria a ningún país afectado, ya que, explicó, todavía no ha comenzado la guerra en el plano terrestre.

La miistra trató de disipar con sus respuestas la "cierta inquietud" que, a su juicio, se está produciendo en la opinión pública ante la confusión que transmiten algunos medios informativos nacionales.

Respecto a la fragata "Extremadura", emplazada frente a las costas de Turquía, precisó que ésta sólo participa en maniobras de la OTAN y, por tanto, la flotilla naval española sólo está compuesta actualmente por tres naves: la fragata "Victoria" y las corbetas "Infanta Elena" y "Vencedora".

"Algunos medos de comunicación han dicho que había 6 barcos en la zona: hay tres que van y tres que vuelven. Creo que no se reflexiona lo suficiente", puntualizó.

En cuanto a las críticas formuladas por los familiares de los soldados pertenecientes a la tercera flotilla enviada al Golfo sobre la falta de concreción de la fecha en que partirían éstos, Rosa Conde dijo: "Por razones de seguridad, se comunicó la partida de los buques 22 horas antes. El Gobierno comprende y comparte la reacción emocional de los familires".

La ministra consideró que no es necesaria, de momento, una nueva comparecencia de los ministros de Asuntos Exteriores y Defensa en el Congreso de los Diputados, como han solicitado algunos grupos de la oposición.

Preguntada por las manifestaciones registradas en los últimos días contra el envío de soldados al Golfo, indicó que "en la opinión pública hay un rechazo no tanto a la posición adoptada por el Gobierno como a la evolución del conflicto".

Las manifestaciones son "un elemento depreocupación", añadió, "pero como dijo el presidente, España ha adoptado la posición que puede y debe adoptar como país, y por ello, ha contado con el 94 por ciento del apoyo del Parlamento".

Rosa Conde pidió que estos actos transcurran de forma pacífica, ya que las fuerzas de seguridad "deben estar dedicadas básicamente a evitar posibles atentados" por parte de elementos pro-iraquíes.

Abundando en el análisis de las posturas encontradas que se han registrado en el país sobre la participación espñola en el conflicto, agregó: "Fuera de España, algunos medios de comunicación nos critican por defecto, porque consideran que nos comprometemos menos de lo que debiéramos. En españa, se nos critica por exceso".

Sobre las informaciones facilitadas por Felipe González a los líderes parlamentarios y la "exclusión" del dirigente de IU, Julio Anguita, la Portavoz declaró que "el Gobierno ha intentado tener informados a aquellos líderes que apoyan la posición española. Parece razonable que este esfuerzo vaa dirigido a cohesionar aún más esta posición".

Finalmente, formuló un nuevo desmentido del Gobierno a las informaciones aparecidas esta semana en diversos medios de comunicación, en las que se aseguraba que el presidente de Estados Unidos, George Bush, pidió una contribución económica a España para la fuerza multinacional.

"La única ayuda económica prestada por España es la que hacemos a través de la Comunidad Europea para los países afectados por el embargo. Si en el transcurso del conflicto lacoalición nos lo pide, lo estudiaremos", concluyó.