El Banco de España está en estado de interinidad desde el pasado 11 de junio tras el fin del mandato como gobernador de Pablo Hernández de Cos. El puesto lo ocupa de manera temporal la subgobernadora, Margarita Delgado, en lo que es una situación inédita. Si este escenario sin precedentes se alarga hasta el 18 de julio, el organismo no tendrá derecho a voto en Frankfurt.

El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, lideran las negociaciones desde incluso antes de pactar la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Y, al igual que en esos contactos, la idea de ambas partes es blindar las conversaciones, aunque tanto en Moncloa como en Génova han reconocido su predisposición a cerrar un acuerdo antes de la cumbre del BCE.

El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, fue quien adelantó que se quería buscar sustituto para que España tenga voto en la próxima reunión y es la posición que mantienen en el Ministerio a día de hoy. No obstante, tanto Gobierno como PP priorizan “un acuerdo bueno” a un “acuerdo rápido”.

“Podemos esperar hasta septiembre”, señalaron a Servimedia fuentes de Moncloa. Parecen no tener prisa en renovar los cargos de gobernador y subgobernador del Banco de España precisamente por priorizar “un acuerdo bueno” a un “acuerdo rápido”.

“Somos conscientes de que el próximo 18 de julio es la cumbre del BCE”, aseguraron, pero también puntualizaron que “podemos tirar con la subgobernadora”, añadieron, para hacer ver que el Ejecutivo no va a “pactar por pactar”.

La propia gobernadora interina ha afirmado recientemente que España tiene “derecho de voz y la voz se puede escuchar” en el BCE, puntualizando que ella daría “bastante poca importancia” al hecho de no tener voto porque las decisiones se toman por consenso. En cualquier caso, Delgado se ha posicionado a favor de que el nombramiento se produjera en “semanas” para “volver a la normalidad”.

"SOLO CONTACTOS PUNTUALES" ENTRE GOBIERNO Y PP

Fuentes gubernamentales reconocieron que, hasta el momento, tan sólo ha habido “contactos puntuales” con el PP, pero sin sentarse a presentar los nombres de posibles candidatos. Asimismo, afirmaron que han estado esperando hasta este jueves para sacar adelante el primer trámite que confirme la renovación del CGPJ en la Cámara Baja con el apoyo de los ‘populares’. “No nos fiábamos de ellos”, señalaron para confirmar que, a partir de la semana que viene “nos sentaremos y miraremos nombres”.

Hasta ahora han trascendido varios nombres para suceder a Hernández de Cos, como el de la vicepresidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Monserrat Martínez, que también ha aparecido en las quinielas para subgobernadora; la actual secretaria general del Tesoro y anterior presidenta del FROB, Paula Conthe; quien fuera subgobernador del organismo Fernando Restoy, hoy presidente del Instituto de Estabilidad Financiera; Ángel Ubide, que trabaja en el fondo Citadel; el actual presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA), José Manuel Campa; e incluso el actual ministro de Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá, quien ha dicho que “no es algo que tenga pensado”.

El de la propia Delgado también ha sonado y como la opción preferida por el sector financiero, pero con menos posibilidades. Igualmente ha trascendido en la prensa el nombre de Ramón Quintana, director general del Mecanismo Único de Supervisión (MUS) del BCE, para ser subgobernador a elección del PP. Mientras tanto, Delgado ejerce de gobernadora interina y subgobernadora como mucho hasta septiembre, cuando vence su mandato, improrrogable.

DISCRECIÓN EN EL PP

En el PP han optado por un perfil más bajo. “Cuando hay unas conversaciones abiertas se informa cuando se llega al final de las mismas, cuando se llega a los acuerdos”, afirmó Gamarra este pasado miércoles. Pero, aunque los populares rehúsan hablar de plazos, todas las fuentes consultadas en privado en el partido coinciden en la necesidad de acordar un nuevo gobernador del Banco de España antes de la cumbre del BCE.

No obstante, en Génova rechazan que esta situación sin precedentes implique un “acuerdo rápido” por el que se elija un perfil que, a su parecer, no sea apto para la responsabilidad que supone dirigir el Banco de España, bien por su formación o politización. Y ponen de ejemplo al ministro José Luis Escrivá. “¿Qué crees que diría de su propia reforma de pensiones?”, explicitaron.

Al margen del Banco de España, Gobierno y PP prevén también negociar la renovación de las cúpulas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En el caso de Competencia, el Ministerio de Economía debe proponer ya cinco nuevos consejeros.