En una respuesta parlamentaria a la diputada del Grupo Popular Alicia Castro, el Ejecutivo dice que la solución a este problema "no es fácil ni evidente", e indica que la Confederación Hidrográfica del Guadiana está trabajando en un plan para la regulación y uso sostenible de los recursos hídricos en la citada cuenca, pero señala que sus efectos sólo serán visibles a medio o largo plazo.

Entre tanto, Las Tablas de Daimiel están sujetas a "los avatares" de la climatología, de manera que en años de sequía se produce una "carencia imposible de remediar". En ese sentido, el Gobierno descarta la eficacia de un eventual trasvase desde el acueducto Tajo-Segura, porque el desvío de agua "ni siquiera alcanzaría el Parque Nacional".

Además, indica que una parte de las especies que habitan en Las Tablas están "perfectamente adaptadas a la alternancia de ciclos de inundación y sequía", mientras que las especies propias de las zonas de humedal "han emigrado a sitios mejores mientras se mantiene la situación" de sequía.