EL GOBIERNO SE NIEGA SEPARAR ESA REFORMA CONSTITUCIONAL DE LAS OTRAS TRES
- Eduardo Zaplana afirmó esta mañana que "probablemente" habrá que abordarla "por separado"
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El Gobierno se niega en redondo a separar la reforma constitucional para eliminar la prevalencia del varón en la sucesión al trono de las otras tres reformas pendientes, según reiteraron hoy a Servimedia fuentes gubernamentales.
En el Ejecutivo se han acogido con sorpresa las palabras del portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, que esta mañana, en declaraciones a Tele 5, afirmó que la reforma sobre la sucesión hay que zanjarla "lo antes posible" y que "probablemente" tendrá que abordarse "por separado" de las otras tres.
Ayer, tras conocerse el embarazo de Doña Letizia, fuentes del PP coincidieron con el Gobierno en que no corre prisa la reforma y que, en esa materia, hay acuerdo pleno con el Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero.
Las fuentes gubernamentales consultadas recuerdan que, aún con acuerdo de las dos grandes fuerzas políticas, la reforma de la sucesión (Título II, artículo 57.1 de la Constitución) es técnicamente muy complicada porque afecta al "núcleo duro". Tienen que aprobarlo tres quintos de las Cortes, ser disueltas éstas y, las nuevas Cortes, convocar un referéndum de ratificación.
Ayer, las fuentes del PP consultadas admitían el riesgo de convocar un referéndum sólo para que los españoles se pronunciaran sobre una cuestión que afecta a la monarquía.
En ámbitos socialistas se destacaba meses atrás una tesis similar, yendo más allá: Un "no" relativamente alto en porcentaje, aunque triunfara el "sí", o un porcentaje de abstención abultada en toda España y, muy particularmente en el País Vasco y en Cataluña, podría desatar el cuestionamiento de la monarquía como institución.
De momento, Gobierno y oposición se esforzaron ayer por enfriar el debate de la reforma sucesoria. El Consejo de Estado, que analiza las propuestas de reforma constitucional formuladas por el Gobierno en cuatro ámbitos (reforma del Senado, inclusión de la denominación de las autonomías, mención a la Constitución Europea y sucesión), no tendrá listo su informe antes de fin de año.
Será entonces, con el informe del Consejo de Estado en la mano, cuando el Gobierno llame a consultas a todos los partidos políticos, en particular al PP, sin el que es imposible reunir los tres quintos de las Cortes necesarios para reformar la Carta Magna.
REFORMA RETROACTIVA
Ayer, el propio Rey Don Juan Carlos y el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, salieron al paso del debate abierto señalando que, de momento, el próximo heredero es el Príncipe Don Felipe. López Aguilar fue más allá al recordar que si es niña podrá reinar con el actual marco constitucional, siempre y cuando los Príncipes no tuvieran un segundo hijo varón.
Con el artículo 57.1 de la Carta Magna ahora vigente, seríaese segundo hijo varón el sucesor, pero el presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio LLorente, se apresuró ayer a recordar que no hay prisa porque, aunque la reforma sea aprobada en referéndum con la infanta ya nacida (noviembre de este año), la reforma tendrá carácter "retroactivo" en su beneficio.
De esta manera no será necesaria una reforma urgente de la Constitución, un objetivo que el Ejecutivo sigue manteniendo para el final de la legislatura, en el año 2008.
En las declaraciones a Telecinco, Eduardo Zaplana ha resaltado hoy que la reforma sucesoria debe hacerse "con la menor polémica posible" y, si hay consenso, "lo haría en el espacio más breve posible".
El dirigente popular ve "lógico" que haya saltado la polémica, pero, precisamente por eso, estima que no hay que dejar pasar "demasiado tiempo ni dejarlo en la ambigüedad".
(SERVIMEDIA)
10 Mayo 2005
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