Por un lado, en el PSOE creen que se dan las condiciones para que la aritmética parlamentaria les permita convalidar el texto sin el apoyo de sus socios de legislatura -ERC, PNV y Bildu, que se aferran a su reiterado 'no' al texto- pero no afirman explícitamente que tienen los números porque varios de los partidos minoritarios que le dan ese salvavidas no quieren confirmar sus apoyos.

Así, fuentes socialistas consultadas por Servimedia se muestran tranquilas y convencidas de que la reforma será convalidada, pero se niegan a ofrecer el detalle de los partidos que les darán el respaldo necesario. Incluso, una fuente gubernamental apuntaba esta tarde que no descartaba una abstención de última hora de ERC, si bien admitía que sus portavoces han sido demasiado "contundentes" en sus declaraciones contrarias, como para recular en el último momento. Al PNV, esta fuente le ve en cambio enrocado en la "cerrazón" de exigir la prevalencia de los convenios autonómicos sobre los estatales, de forma que prevé que se mantenga en el 'no'.

Además, en el PSOE creen que la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, sigue negociando con ERC, principalmente, porque no quiere que su proyecto estrella sea convalidado sin el apoyo de las principales formaciones de izquierda de la Cámara sino gracias a Ciudadanos. Un voto el de este último partido que fuentes del PSOE dan por bienvenido, toda vez que ha sido a cambio de nada y sin necesidad de negociación.

De hecho, Díaz, en declaraciones en los pasillos del Senado, volvió hoy a emplazar tácitamente a esas formaciones, al advertirles de que tendrán que explicar por qué están dispuestas a que los trabajadores, el viernes, amanezcan con menos derechos laborales de los que tenían el jueves, dado que la reforma laboral está vigente desde su aprobación en Consejo de Ministros el 30 de diciembre, pero decaería si no resultara convalidada en el Congreso, y se volvería automáticamente a la legislación aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy.

PRIMEROS EFECTOS

La ministra advirtió además de que mañana se conocerán unos datos de contratación indefinida "muy positivos" que demostrarán que la reforma ya está "desplegando sus efectos". Fuentes cercanas, que atribuyen a tácticas partidistas de deslegitimación de la líder de Unidas Podemos la cerrazón de ERC, les afearon que "con las cosas de comer no se juega". Creen que finalmente la reforma saldrá adelante, pero atestiguan que, de momento, no cuentan con los votos necesarios.

Díaz agradeció a Más País, Compromís, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Teruel Existe y el Partido Regionalista de Cantabria su apoyo ya confirmado, bien en público o bien a esta agencia, a la convalidación del decreto. Con ellos más los partidos del Gobierno más Ciudadanos, ésta tendría garantizados 170 votos a favor. Pero el PP, Vox, ERC, el PNV, Bildu, JxCat, la CUP y Foro Asturias suman 172 en contra.

Así las cosas, el veredicto final del jueves dependerá, si no hay cambios en estas posiciones, de lo que voten el PDeCat (cuatro diputados), Navarra Suma (2) y el diputado escindido de Ciudadanos Pablo Cambronero. Fuentes gubernamentales aseguran que el PDeCat les ha prometido el voto a favor, pero fuentes de este último partido consultadas por Servimedia lo negaron terminantemente: "No hemos garantizado nada".

Mañana se reunirá la Ejecutiva de la formación para decidir su voto, pero en principio rechazan la importancia que el PNV y ERC han venido otorgando a la prevalencia de los convenios autonómicos sobre los estatales, una exigencia que les ha sido denegada por el Gobierno y explica de forma total y parcial, respectivamente, el rechazo de dichas formaciones. Según razonan, esta prevalencia tendría poca operatividad por cuanto que la mayoría de las empresas se acogen a los estatales.

Por su parte, fuentes de Navarra Suma consultadas por esta agencia se negaban hace días en redondo a apoyar una reforma que viniera condicionada por el hipotético apoyo de ERC y sobre todo EH Bildu, pero no descartaban sumarse si el texto se mantenía tal y como se aprobó en el Consejo de Ministros y por tanto los partidos nacionalistas no entraban en la ecuación, que es lo que si no hay novedades de última hora sucederá finalmente. Posiblemente, los regionalistas navarros concreten también mañana su decisión.