Las mismas fuentes explicaron a esta agencia que la carta que hoy publican conjuntamente Zapatero y el primer ministro turco, Tayyip Erdogan, en el 'International Herald Tribune' fue remitida a ese diario el viernes por la tarde, un día antes de que se produjera el incendio de la Embajada de Dinamarca en Siria.

Tras este acto, que supuso también la quema de las Embajadas noruega y chilena, en el mismo edificio de Damasco, hoy han continuado en distintos países musulmanes las protestas por la reproducción en periódicos occidentales de caricaturas de Mahoma.

Los altercados han causado al menos cuatro muertos en diferentes lugares, mientras que en Teherán, la embajada austriaca ha sufrido un ataque con 'cócteles molotov'.

En Teherán, la capital de Irán, unas 200 personas se concentraron ante las puertas de la legación austriaca y arrojaron piedras y artefactos incendiarios. La policía antidisturbios tuvo que intervenir para evitar que las llamas se propagasen por el edificio.

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha ordenado a todas las embajadas españolas que refuercen la vigilancia "para garantizar la seguridad". Lo ha hecho antes de saberse que esta tarde en Iraq se quemara una bandera española durante una manifestación.

La embajada danesa en Madrid ha reforzado las medidas de seguridad, según comentó el embajador danés, Niels Pultz, que no quiso precisar si se han recibido amenazas

Las fuentes consultadas por Servimedia aclararon que cuando Zapatero y Erdogan hablan en el artículo entregado el viernes pasado al 'International Herald Tribune' de "desafortunados acontecimientos" se refieren a las viñetas sobre el profeta Mahoma aparecidas en prensa europea y a las consiguientes manifestaciones, no a los posteriores asaltos a embajadas.

Zapatero, sostienen estas mismas fuentes, sigue decidido a defender la búsqueda de "iniciativas e instrumentos que pongan fin a esta espiral de odio y ofuscación que constituye una amenaza a la paz y a la seguridad internacional", como afirma en el artículo con el primer ministro turco.

El jefe del Ejecutivo mantiene la idea reflejada en el texto de que las viñetas sobre Mahoma publicadas originalmente por el periódico danés 'Jyllands Posten' son rechazables "desde el punto de vista de la moral y la política".

No obstante, desde el Gobierno se prefiere resaltar esta tarde la llamada a la calma que hacen Zapatero y Erdogan, y su reiterada condena de todo acto violento.