Así lo señaló en declaraciones a los medios de comunicación horas después del cambio de postura del Gobierno francés, que, hasta el momento, se había negado a aceptar la petición de España.

Ribera subrayó que el Gobierno recibe con “aprecio” las palabras de Le Maire y que reflejan con “convicción” el “compromiso” del país vecino “para trabajar con el resto de los socios europeos”. En este sentido, apuntó que se trata de “una respuesta adecuada a la necesidad de contar con una voluntad constructiva" y “a analizar las propuestas concretas”.

Aunque reconoció que no ha tenido “ocasión” de poder hablar con el Ejecutivo francés sobre el cambio de postura, insistió en que las declaraciones ponen de manifiesto la voluntad “inequívoca” de Francia para dar una respuesta “europea” y la “voluntad” de trabajar “conjuntamente por encontrar la mejor solución”.

Preguntada por la conexión submarina entre Barcelona y Livorno (Italia) y si ambas obras son complementarias, la ministra aseguró que “los tiempos son distintos” y que el proyecto con Francia es mucho “más ágil, rápido y directo” porque los estudios están más avanzados. Aunque evitó pronunciarse sobre los plazos, aseveró que son los técnicos a los que les corresponde ver “cuáles pueden ser las dificultades de presión o de otro tipo para poder llegar al otoño de 2023 con esta infraestructura operativa”.

Asimismo, subrayó que al tratarse de una infraestructura europea debe contar con “financiación comunitaria” e indicó que, aunque los parámetros económicos del proyecto “no son los mismos que hace dos o tres años”, hay un nivel de trabajo “bastante importante” ya avanzado.

PLAN DE CONTINGENCIA

Al respecto de la ronda de contactos para elaborar el plan de contingencia, la ministra detalló que están recibiendo propuestas de las comunidades autónomas, concretamente de País Vasco, Navarra, Baleares y Cataluña, aunque indicó que le consta que la “mayoría” de las autonomías propondrá medidas.

Además, mantuvo la intención del Gobierno de presentar el plan en septiembre y señaló que los ayuntamientos también han mostrado “disponibilidad” para contribuir al ahorro energético desde el ámbito local.