Así lo expresó hoy en rueda de prensa el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, durante la presentación del "Diagnóstico del sistema de financiación de las comunidades autónomas", un documento que se limita a analizar el sistema pero sin aportar propuestas.

Este documento responde al compromiso adquirido por el Gobierno el pasado 27 de junio en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Las comunidades también adoptaron este compromiso que sólo han cumplido Andalucía y Cataluña.

Tras insistir en que este documento es sólo un diagnóstico que no incluye propuestas concretas, Ocaña señaló que hay cuestiones que el Gobierno tiene pensadas para este sistema.

"No hay decisión tomada, pero un sistema que se declare permanente está condenado a no serlo. Tendrá que adaptarse a los cambios muy notables que se producen en el sistema", indicó Ocaña.

Por ello, consideró "razonable" que el nuevo modelo de financiación "tenga capacidad de replantearse cada cuatro o cinco años".

Por otro lado, el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos advirtió de que hay que evitar que, en los nuevos mecanismos de financiación, sea el Estado quien aporte recursos adicionales a las comunidades autónomas.

"A diferencia de otras reformas, no cabe pensar que el Estado traspase recursos adicionales a las comunidades autónomas, sino que hay que trabajar por mejorar la flexibilidad del sistema y la capacidad normativa", subrayó Ocaña.

Pese a ello, Ocaña reconoció que en la presente legislatura "es difícil" que pueda definirse el nuevo modelo de financiación autonómica, si bien dijo que "será lo primero" que se haga en la próxima.

"De aquí a las elecciones autonómicas parece muy difícil que se avance en la negociación, pero podemos seguir trabajando desde el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para desbrozar el camino", puntualizó el secretario de Estado de Hacienda.