Estos cambios en las previsiones vienen forzados por las modificaciones metodológicas introducidas en la Contabilidad Nacional por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que han incorporado algunas novedades comunitarias y han sumado el impacto de la inmigración en los últimos años.

Así, la nueva contabilidad ha elevado el crecimiento del 2,8% al 3,5% para 2001, del 2,2% al 2,7% en 2002, del 2,5% al 2,9% en 2003 y del 2,7% al 3,1% en 2004.

A partir de estas modificaciones, el departamento que dirige Pedro Solbes ha elaborado las nuevas previsiones, apoyándose en que la economía española creció un 3,3% en el primer trimestre de 2005 y que los datos recopilados indican ligeros repuntes en el segundo trimestre, impulsados por el consumo interno y a pesar de la carestía del petróleo y del déficit exterior.

Algunos expertos ya han apuntado el mayor crecimiento de la economía española. Así, la OCDE ha elevado al 3% la previsión de mejora para 2005 y al 3,2% para 2006, mientras que el servicio de estudios de "la Caixa" es más optimista y considera que España crecerá un 3,4% este año y un 3,8% en 2006.