Decreto anticrisis
Garzón apuesta por introducir la “progresividad” en la ayuda al combustible
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El ministro de Consumo, Alberto Garzón, abogó este miércoles por introducir la “progresividad” en relación a medidas como la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible al repostar, así como por implementar las medidas “que sean más eficaces” para aliviar la situación económica de las familias.
Así lo defendió en una entrevista en ‘Las mañanas de RNE’ recogida por Servimedia en la que se mostró “abierto” tanto a extender como a realizar cambios en el real decreto de ayudas para paliar las consecuencias de la guerra en Ucrania.
“Yo creo que hay que estar abierto a las dos posibilidades”, agregó, convencido de la importancia de “entender” que España atraviesa “un momento muy difícil para las familias trabajadoras”. “Especialmente, cuando hablamos de la inflación estamos hablando de la pérdida de poder adquisitivo, de que suben los precios de alimentos básicos en una cesta de consumo y, sin embargo, no suben al mismo tiempo los salarios”, espetó, convencido de que este escenario “ha llevado a la heterodoxia al Banco Central Europeo cuando recomienda, por ejemplo, subir los salarios”.
MEDIDAS EFICACES
Garzón apostó por “elegir las medidas más eficaces”, convencido de que, con respecto a la bonificación del combustible, “en su momento, lo eficaz era que tuviera una implantación directa”. “Por eso se hizo una medida de apoyo al conjunto de la población en el ámbito de los suministros de combustible fósil, en este caso de la gasolina”, añadió.
“Ahora, de lo que tenemos que hablar es de si es posible precisar mucho mejor esto para que sea todavía más eficaz”, agregó, para sugerir que dicha subvención se “dirija sólo a aquellas rentas que verdaderamente lo necesiten o que estén mucho más expuestas, sencillamente porque son más vulnerables”.
En este punto, Garzón advirtió de que, cuando se otorgan subvenciones a toda la población, se trata de una “medida regresiva”. “No necesita la misma cantidad de subvención una gran fortuna que cobra 200.000 euros al año, que una pequeña fortuna que no llega ni a 10.000 euros al año”, ejemplificó.
Preguntado por el margen del que dispone el Ejecutivo para introducir dicha progresividad en el decreto, el ministro defendió que “la política se tiene que poner siempre por encima de lo jurídico” y que, si la medida “no entra en este real decreto por razones técnicas, tendrá que entrar en otra fórmula”.
“Al final, la clave es que las medidas se puedan implantar”, aseveró, al tiempo que indicó que en el seno del Gobierno “se está debatiendo desde hace bastante tiempo” cómo se puede “afinar y precisar mucho mejor para focalizar la medida y que sea mucho más eficaz y, sobre todo, más progresiva”.
Con respecto a los detalles para introducir dicha progresividad, recordó que es algo que “ahora mismo se está estudiando, se está negociando”, si bien, a su entender, “la experiencia nos dice que, efectivamente, lo que tenemos que hacer es estructurar las ayudas en función de la renta”.
“Esto es básico de entender, porque, al final, tu capacidad de llenar el combustible depende, fundamentalmente, de tu restricción presupuestaria y, si tú tienes un presupuesto más elevado, tendrás más capacidad”, explicó, para reiterar la urgencia de “ayudar a los más vulnerables”.
“Decenas de miles de familias españolas que necesitan el coche porque hay ausencia de infraestructuras en servicios públicos o porque, por las razones que fuera, necesitan el coche para ir a trabajar y se les está encareciendo de manera brutal ese transporte absolutamente necesario en esas condiciones”, lamentó, para criticar que, en paralelo, no se produce una subida de salario, lo cual desemboca en el “empobrecimiento relativo de sectores poblacionales”.
SER AUDACES
A su juicio, en la actualidad “se está redefiniendo todo el panorama político, de la teoría política y económica”, lo cual, dijo, “nos obliga a ser audaces”. “Y a ser audaces significa tener muy claro que el principal objetivo de un gobierno progresista tiene que ser proteger a las familias trabajadoras y a los más vulnerables”, apostilló.
En este sentido, aseveró que el “escudo social” puesto en marcha por el Ejecutivo a causa de la pandemia “es algo que tiene que ser un instrumento básico”. “A partir de ahí, se tiene que reconstruir todo”, abundó, para volver a reivindicar la urgencia del país de “cambiar nuestro modelo productivo”.
A este respecto, reiteró la “necesidad” de utilizar los fondos europeos “como una palanca, no solo para una reindustrialización, sino para una reindustrialización que eleve el contenido tecnológico de nuestra producción y de nuestras exportaciones”. “Al mismo tiempo, tenemos que combatir la enorme desigualdad que es origen de muchos de los malestares y expresiones políticas que estamos viendo en los países occidentales, particularmente en Europa”, concluyó.
(SERVIMEDIA)
01 Jun 2022
MJR/gja