"Nosotros", dijo el líder de EA, "fuimos los primeros desde la constitución de la Mesa de Ajuria Enea que propugnamos una política de diálogo con el mundo de HB y hubo una reacción cerrada y airada, tanto desde el PNV como desde el PSOE".

Garaikoetxea señaló que no quiere opinar sobre el encuentro de hoy entre el ministro del Interior Antoni Asunción, y el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, para aclarar la estrategia antiterrorista, tras la polémica creada con la propuesta del PE-EE de potenciar el diálogo con HB, "ya que nuestro puntos de vista", explicó, "siempre han sido muy coherentes y por eso quizá han resultado incómodos".

El dirigente de EA ha señalado que siempre hubo contactos PSOE-ETA y, cuando convino, el PNV también habló con HB sobre acuerdos como la cesión de la autovía Navarra-Guipúzcoa con plazos inconfesables ola obtención indirecta de apoyo "para arrebatarnos la Diputación de Guipúzcoa. Esto es lo que nos hizo afirmar que aquello era una manipulación partidista, llena de inconsecuencias".

Mientras EA tenía prohibido hablar con HB incluso en debates televisivos, en época electoral, ahora "el PSOE anuncia un giro, que en definitiva pone de manifiesto que nosotros teníamos razón al decir que había que hablar desde la representatividad que pudiera ostentar, en nombre de sus electores, HB".

La propuesta soialista de contactar con sectores de HB no ha sorprendido tanto a Eusko Alkartasuna en su contenido, sino en cuanto que "constituye un giro de posturas que venían manteniendo exactamente contraria y enérgica, haciendo alarde de ella, de incomunicación y aislamiento total de HB".

Incluso, Garaikoetxea se reafirmó en que su propuesta va siendo asumida por la coalición 'abertzale', al decir que los partidos políticos tienen que ser los "que tengan la última palabra".

"Sin ninguna jactancia", declaróGaraikoetxea a Servimedia, "lo que decíamos hace muchos años nosotros con una constancia que nos ha merecido tanto anatema, es lo que unos y otros están diciendo ahora, pero de una manera muy lamentable, partidista y desde una especie de disputa impúdica por ver quién mantiene mayores protagonismos".

Asimismo, desde EA se advierte que no quieren entorpecer ningún proceso y menos por pruritos de protagonismos. "Lo que naturalmente creemos es que los partidos políticos que representan algo en este país,y EA representa algo, deben tener esa voz y el voto que les corresponde ante el momento de adoptar posiciones políticas al respecto".

"Si el ministro (del Interior) no habla con nosotros, él se lo perderá", dijo, "porque pondrá de manifiesto un determinado sectarismo o una desconsideración de unos partidos respeto a otros. Creo que empezará con mal pie porque no tomará el pulso a toda la sociedad vasca, sino a una parte de ella".

LEGITIMIDAD DE HB

Por otra parte, el presidente de EA manifestó aOnda cero que HB "tiene una representación popular y en nombre de esa representación popular sí puede hablar, está legitimado para hablar y tenemos la obligación de escucharle".

"Nosotros hemos dicho siempre", añadió, "que todo lo que pueda aproximar a una salida de esta cadena de sufrimientos y horrores que trae la violencia y a una paz y normalización del país, es decir, un diálogo, y un diálogo con quien está legitimado para hablar como es una fuerza política que tiene representación popular como Hrri Batasuna, será bienvenida".

Según Garaikoetxea, "ETA no representa acreditadamente en las urnas a nadie", pero "Herri Batasuna representa un 16 por ciento de la población, y podrá pretender ni más ni menos que hablar en nombre de ese 16 por ciento y ponderar esa representación que tiene con la que tenemos todos los demás, para llegar a soluciones".

El presidente de EA indicó también que "hay que tener siempre actitudes abiertas, generosas, flexibles y a veces hasta mirar hacia otro lado si reulta necesario, para acelerar las salidas al conflicto".

Respecto a Navarra, recordó que él es navarro y que "hay que respetar la voluntad de los navarros". "Soy partidario de que Navarra, que es la cuna histórica de Euskalherría, sea parte de un proyecto político común con el resto de Euskalherría, pero jamás me propondré ni creo que consentiré que se haga ni eso ni lo contrario contra la voluntad de la mayoría de los navarros", agregó.