En una rueda de prensa convocda por sorpresa, que Alvarez Cascos ha justificado en la negativa de su partido a aparecer con un "silencio" cómplice del ataque del Ejecutivo a los jueces, el `número dos' del PP ha recapitulado lo ocurrido desde 1987 hasta hoy. Aprovechó para anunciar que en el Debate sobre el Estado de la Nación, que mañana empieza en el Congreso, el PP presentará una moción en defensa de la independencia judicial.

Los populares dividen el caso GAL en tres fases, que comienza cuando el Gobierno, en 1988, una vez aprecidas en prensa las primeras evidencias, "renunció a investigar la trama". La segunda fase comienza con José Amedo y Míchel Domínguez ya en prisión, en el momento en que los socialistas protagonizan un "intento claro de compra de silencio" de los ex policías.

Recordó el secretario general del PP las idas y venidas a Suiza de las esposas de los policías y de altos funciones de Interior enviados por Rafael Vera. Aquí se incluye también el episodio protagonizado por el anterior fiscal general del Estad, Eligio Hernández, presionando a la Fiscalía de la Audiencia Nacional para que no se opusiera al indulto.

La tercera y última fase, que el PP denomina "Reapertura del `caso Marey' y arrepentimiento de los condenados (Amedo y Domínguez)" abarca los acontecimientos vividos desde la pasada Navidad. Incluido el intento de Vera de designar juez instructor "a la medida de sus conveniencias", en referencia a la recusación de los magistrados Baltasar Garzón y Carlos Bueren.

El PP cree que, a día de hoy,se han llegado a niveles "increíbles" en los intentos del Ejecutivo y de Felipe González por enmascarar lo que está ocurriendo. Si los hechos, desde 1987 para acá, permiten establecer relación de causa-efecto y acusar a Felipe González y a su Gobierno de "encubrimiento", el nuevo ataque, dijo, consistente en llevar al terreno de la constitucionalidad la Ley que permite a los jueces volver a ponerse la toga tras haber pasado por la política, es alarmante.

LA "ESQUIZOFRENIA" DE GONZALEZ

Alvarez cascosafirmó que Felipe González es en estos momentos preso de una "esquizofrenia" porque es quién está suministrando a la Justicia y a los medios de comunicación, a través del ministro Belloch, documentos comprometedores, a la vez que despliega una estrategia contra los jueces. Sobre lo primero, se preguntó quien, si no el ministro de Interior, puede `filtrar' las listas de abogados que cobran de los fondos reservados, o los registros de entrada en el Ministerio de Interior de las esposas de Amedo y Domínguez. A su juicio, en el "ajuste de cuentas con su pasado" que González intenta hacer para no pasar a la historia como un gobernante manchado, el líder socialista está traicionando a gentes como Joaquín Leguina y otros, que están defendiéndole aún cuando es él quien saca a la luz todo.

Preguntado el por qué de esta sorpresiva rueda de prensa, en la víspera del Debate sobre el Estado de la Nación, el secretario general del PP reconoció que, aunque José María Aznar aborde mañana el tema, el citado debate o es foro adecuado para tratar "monográficamente" el asunto GAL.

"Ante estas evidencias, el PP quiere decir con toda claridad que la ética es incompatible con la falta de respeto a la verdad y que el Gobierno que no colabora con el esclarecimiento de la verdad no puede tener marchamo de actitud ética", advirtió.

Por otro lado, Francisco Alvarez Cascos aseguró que el dirigente del PP Rodolfo Martín Villa tiene "plena coincidencia" con los postulados del PP en esta cuestión y que está "absolutament identificado" con lo que dice el partido. Martín Villa se ha mostrado comprensivo con el anterior equipo del Ministerio del Interior y ha llegado a decir que Vera "está haciendo lo que debe hacer", en referencia a su estrategia de defensa.