Maragall explicó durante la inaguración en el Museo Picasso de una exposición sobre la vida del pintor malagueño en Barcelona, que el votode CiU a favor de la comparecencia de Serra "se trata de una venganza de Pujol contra Serra", después de que éste último le pidiera, "que confesara que él le apoyo para sacar a De la Rosa del asunto de Port Aventura".

El alcalde barcelonés recriminó a Pujol que "en lugar de agradecérserlo, sin decir nada, le obligue ahora a comparecer". En opinión de Maragall este acto es producto de la actitud vengativa que despide el caracter de Jordi Pujol. "Pujol tiene obsesiones y una de ellas es Serra, es un homre que no perdona ni con el paso del tiempo y por muchos pactos que haya llegado (con el PSOE) mantiene vivo el rencor", declaró.

En este contexto, Maragall aprovechó para cuestionar la tregua ofrecida por Pujol ayer al resto de partidos para sosegar el clima político. "Pujol no puede ofrecer ni pacto ni tregua y al mismo tiempo clavar la puntilla por la espalda a Serra, obligándole a presentarse ante la comisión, cuando él sabe que ninguna de las acusaciones es cierta", aseguró.

En opinión del acalde de Barcelona, detrás del voto de CiU en la 'comisión GAL' está "el nerviosismo y el mal humor" de la coalición nacionalista por el caso del financiero Javier De la Rosa.