Al ser preguntado en los pasillos del Congreso, Almunia subrayó que esta operación entra dentro de la lógca impuesta por la necesidad de las entidades financieras de buscar un tamaño suficiente para competir en una economía mundial y para garantizar su propia estrategia.

Sin embargo, advirtió de que, además de redundar en una mayor capacidad de nuestro sistema financiero, esta operación debe beneficiar a los usuarios y, para ello, "hay que tener cuidado" y evitar que la concentración reduzca la competencia y, por ejemplo, "nos cobren más tipo de interés de lo que debieran" o empeoren el servicio.

Alunia recordó que el financiero es un servicio "de interés general" y el Banco de España, junto al resto de autoridades económicas y financieras deben velar por su correcta prestación y proteger los derechos de los usuarios.

Como vasco, Almunia comentó entre sonrisas que la apertura de la sede central de la futura entidad en Bilbao "me parece muy bien".