El programa ‘Pisadas de Dignidad’ ('https://www.fundaciononce.es/es/pisadas-de-dignidad') forma parte del propósito de Fundación ONCE de desarrollar iniciativas específicas para aquellos colectivos de personas con discapacidad que, por la complejidad de sus circunstancias personales, tienen especiales dificultades de inclusión laboral y, por lo tanto, social.

En este caso, se busca acompañarles hacia un nuevo objetivo profesional enmarcado en la protección de sus derechos humanos. El recurso se articula a través de un itinerario individualizado de acciones para el empoderamiento, la mejora de la empleabilidad y la consolidación del empleo de cada uno de los participantes.

El proyecto va dirigido prioritariamente a las personas con ADEE en posesión de licencia para el desarrollo de la actividad de torero cómico y también a las que se dediquen a los espectáculos de entretenimiento para adultos.

La situación personal de cada participante, su perfil psicosocial, su entorno e historia de vida laboral determinará el enfoque individual de su atención, con una metodología de itinerarios que contempla la exploración y análisis de los apoyos y recursos sociales adecuados y legítimos para cada persona.

Con la puesta en marcha de esta nueva línea de ayudas los beneficiarios de ‘Pisadas de Dignidad’ tendrán acceso a diferentes programas de formación y búsqueda de empleo, sin que ello implique la pérdida sustantiva de recursos que permitan a las personas seguir teniendo una suficiencia vital y financiera.

De esta forma, Fundación ONCE financiará el 100% de la cuantía total de la ayuda por persona beneficiaria y hasta un máximo de 6 veces el Salario Mínimo Interprofesional Mensual, redistribuido en 9 meses.

Así, la cuantía de la ayuda se establece en 6.000 euros abonados durante el periodo mencionado, a razón de seiscientos sesenta y siete euros y a tenor de las circunstancias personales, se podrá decidir la prórroga o revisión del importe.

Se estima que en España residen en torno a 5.000 personas con acondroplasia y otras displasias esqueléticas, de las cuales alrededor de 150 están directa o indirectamente relacionadas con actividades de entrenamiento para adultos y espectáculos taurinos.