Según informaron a Servimedia fuentes de la fundación, la fima del citado acuerdo tendrá lugar a las doce de la mañana en la sede de la misma, en Figueras, y correrá a cargo del subsecretario del Ministerio de Cultura, Enrique Linde, y del presidente de la fundación del pintor y ex consejero delegado de la Villa Olímpica, Raimon Boixadós.

El acuerdo, que se podría prorrogar hasta los ochenta años que permite la Ley de Propiedad Intelectual, no significa la cesión de la titularidad de los derechos de la obra de Dalí, que seguirá correspondiendo al Estado.

a fundación se compromete asimismo a ceder al Estado anualmente el 2 por ciento de los ingresos brutos derivados de la gestión, dinero de cuyo cobro velará el propio Ministerio de Cultura. Este departamento tendrá además facultad para vigilar e inspeccionar el cumplimiento del acuerdo.

El citado convenio podrán restringirse por decisión mutua, por incumplimiento de alguna de las cláusulas o bien porque el Ministerio de Cultura decida unilateralmente cancelarlo.

CAMBIO DE MANOS

Con el acto del vernes pasará a depender de la Fundación Gala-Salvador Dalí toda la gestión de la propiedad intelectual del pintor, que desde 1986 venía realizando la sociedad "Demar Pro Arte BV".

Esta empresa fue creada en 1986 por el último secretario de Salvador Dalí, Robert Descharnes, que poseía en exclusiva los derechos sobre la obra del pintor hasta el año 2004, de acuerdo con un contrato firmado en vida por el propio Dalí.

En este sentido, cuando el pasado mes de mayo se hizo público el acuerdo que entra n vigor este viernes, Descharnes anunció acciones judiciales, ya que se consideraba "injustamente perseguido".

Según diversas fuentes, Descharnes habría creado durante estos años una compleja estructura fiscal y los beneficios de la gestión del patrimonio del pintor que debía ingresar en la propia fundación habrían sido destinados a otros fines. Descharnes siempre alegó que el coste de los abogados encargados de proteger el nombre de Dalí había impedido repartir dividendos.

El Estado español fue nstituido por Salvador Dalí como heredero universal y libre de todos sus bienes, derechos y creaciones artísticas, algo que fue aceptado por el Estado a través de un real decreto en diciembre de 1989. Este decreto facultaba a la administración estatal para ceder alguno de sus derechos a la Fundación Gala-Salvador Dalí.

Esta fundación fue constituida en abril de 1983 como institución cultural privada, y en su Patronato están representados la Administración del Estado, la Generalitat de Cataluña y los auntamientos de Figueras y Cadaqués.