"Queremos trabajar juntos en pie de paz para presionar a los gobernantes y lograr un mundo justo, equitativo y en paz", afirma Federico Mayor Zaragoza en una nota de prensa.

Según el Manifiesto, "los pueblos deben unirse y elevar su voz. La guerra es una tragedia para todos. Es urgente desarmar la razón armada. Hoy, más que nunca, son necesarios la capacidad de diálogo y de alianza, el compromiso de intentar la resolución pacífica de conflictos, fomentando actitudes de encuentro y respeto a los demás, mediante la aplicación cotidiana de los Derechos Humanos".

El manifiesto, traducido a 13 idiomas, apuesta también por "cambiar el curso de los acontecimientos a través de acciones colectivas, desarrollando la solidaridad entre los pueblos".

"Es urgente", continúa, "que los intelectuales, artistas, educadores, científicos... abandonen su pasividad y pasen a la acción. Sólo así sus escritos y sus palabras serán creíbles y podrán contribuir a sumar sus esfuerzos a los de muchos otros para detener la locura de la guerra, de la confrontación y de la violencia".

Destacadas personalidades de todo el mundo se han adherido ya a este documento, como los Premios Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Rigoberta Menchú o Betty Williams, así como el ex presidente de Portugal, Mario Soares; la presidenta del Comité Defensa de la Humanidad, Marilia Guimaraes, y el obispo Pere Casaldàliga.

En España, se han adherido destacadas personalidades del periodismo y la cultura como Rosa Regás, José Manuel Caballero Bonald, Luís Eduardo Aute, José Vidal Beneyto o Maruja Torres.

También numerosas organizaciones sociales se han sumado a la iniciativa como La Fundación Valores, ATTAC, la Coordinadora de ONG de Desarrollo de España (CONGDE), Justicia i Paz, Fundación de Cultura Islámica, The World Political Forum y la Asociación Nacional de Víctimas de Delitos Violentos, entre otras.

Cualquier persona u organización puede adherirse al manifiesto a través de la web de la Fundación Cultura de Paz "www.fund-culturadepaz.org".