De las 300 hectáreas de la mencionada finca, 115 se encuentran en el interior de Monfragüe y conforman una ladera de umbría que contiene algunas manifestaciones de monte mediterráneo en buen estado de conservación, según informó hoy la Fundación Biodiversidad.

Sin embargo, el área de umbría está, en su mayor parte, alterada por repoblaciones de eucaliptos, por lo que requiere trabajos de restauración que permitan recuperar sus valores naturales, paisajísticos y, especialmente, como hábitat de las especies autóctonas.

Quince hectáreas de la finca dentro del parque tienen un rodal de pino rodeno de 40 años, con espesura trabada, y en las otras 100 hectáreas, degradadas por las repoblaciones de eucalipto rojo y blanco, se dan pequeñas discontinuidades ocupadas por manchas de monte mediterráneo en un estado de conservación comprometido.