En un país todavía moralmente convulsionado por los altercados de los suburbios en sus grandes ciudades, los parlamentarios franceses acusan a esos siete grupos de rapde hacer negocio vendiendo racismo.

Entre los raperos denunciados está "Monsieur R", autor de una letra que, tras los motines de los suburbios, ha sido puesta como ejemplo de canción incendiaria y promotora del odio entre etnias. Esa canción dice cosas como la siguiente: "Francia es una furcia, no pares de tirártela hasta dejarla agotada (...) Yo me meo encima de Napoleón y del general De Gaulle".

Este rapero en concreto ha sido llevado a los tribunales por Daniel Mach, un diputado de UMP, el partido que gobierna en el país vecino, quien asegura que los ataques a la dignidad de Francia y de su Estado no pueden "esconderse detrás de la libertad de expresión". En caso de ser condenado, el rapero se expone a una pena de hasta tres años de prisión y una multa de 75.000 euros.

Por su parte, según informa la edición electrónica del diario "Le Monde", el ministro de Justicia galo ha dado una instrucción al procurador general de París para que abra una investigación sobre los grupos raperos sospechosos de promover el racismo y el odio inter-étnico.

El problema al que se enfrenta la justicia francesa es que muchos de los grupos denunciados como peligrosos por los parlamentarios ya han desaparecido de la escena musical.

Además, todas estas iniciativas han sido descalificadas por el Movimiento contra el racismo y por la amistad de los pueblos (Mrap), una organización francesa que considera que se trata de buscar en los raperos un "chivo expiatorio" de las recientes jornadas de violencia en los suburbios.

Esta asociación ha decidido incluso abrir un espacio en Internet para poner a disposición de los parlamentariosnumerosas canciones susceptibles de ser denunciadas si se les aplicaran los mismos criterios que a los raperos más subversivos.

"Después de los inmigrantes y de la poligamia, ahora son los artistas los señalados como los incendiarios de nuestros suburbios", concluye el Mrap.