El plan de ajuste de la empresa prevé que de las 1.622 salidas, 626 serían bajas incentivadas con carácter definitivo y 996 serían despidos objetivos con preferencia de recontratación en 2027.

Este es el cuarto ERE que presenta el gigante automovilístico en Almussafes desde 2018, cuando inició su reestructuración en Europa.

El anterior al anunciado este miércoles se puso en marcha en abril de 2023, y afectó a 1.124 trabajadores.

Fuentes de Ford aseguraron que trabajarán de manera constructiva con el comité de empresa para buscar una solución negociada al "excedente de personal" que tiene ahora la factoría valenciana.

Por su parte, UGT afirmó en un comunicado que “desde hace algunas semanas venimos manifestando que hay que arbitrar soluciones transitorias viables”.

“Estamos seguros que contarán con el apoyo de las administraciones y también deberán contar con la predisposición de la dirección de Ford”, agrega el sindicato, que dice que no volverá a la mesa de negociación hasta que haya celebrado una mesa asamblea de afiliados el próximo sábado día 15, por lo que asistirá a la reunión que se producirá el lunes 17.