Investigadores del Centro de Ingeniería de Dunton, en Essex, están desarrollando un dispositivo de bajo coste diseñado para solicitar automáticamente ayuda a través del sistema de seguridad del vehículo, entre una selección de servicios de emergencia o de averías.

La localzación exacta del conductor, la identificación del vehículo y la información de qué reparaciones son necesarias pueden transmitirse en segundos, según Ford.

Ian Mc Allister, presidente de Ford Gran Bretaña, señaló que "para muchos conductores el sistema de localización puede reducir el riesgo de quedarse tirados al borde de la carretera intentando encontrar un teléfono de emergencia".

"Puede igualmente", agregó, "permitir que un vehículo robado pueda ser localizado por la Policía y, si se considea necesario, ser perseguido hasta su intercepción".

Ford cree que el sistema puede estar listo para su utilización dentro de cinco años. En la actualidad se están realizando pruebas con un vehículo prototipo, utilizando mapas detallados del área de Essex encargados a la compañía.

SATELITE

Según Ford, la clave del nuevo sistema está en la utilización de la tecnología de seguimiento por satélite, que permite que un vehículo sea localizado de manera muy precisa. Ello se combina con los últimos sisemas de comunicaciones móviles que se utilizan para transmitir información desde y hacia el vehículo.

El conductor utiliza un mando en el salpicadero para seleccionar uno de los distintos servicios dentro de un menú: avería, policía, ambulancia o fuego; la opción solicitada se visualiza en una pequeña pantalla de cristal líquido y posteriormente, activando un botón, se transmite el mensaje deseado a una estación base establecida para coordinar este tipo de llamadas.

El mismo equipo de comunicacioes que permite a los conductores solicitar asistencia puede igualmente ser utilizado para ayudar a los que han sido víctimas del robo de su vehículo. Si un vehículo es sustraído, la policía puede contactar con la estación base sirviéndose de un número de identificación del vehículo y del número personal del propietario.

Con esta autorización, la estación base puede iniciar un seguimiento del vehículo para determinar su posición exacta. Si el coche está en movimiento, la información que se recibe se acualiza continuamente, de tal manera que la policía pueda perseguir al automóvil e interceptar a los ladrones.