El portavoz popular recalcó que Crdenal "tiene una larguísima trayectoria en la carrera fiscal absolutamente impecable, y todo el mundo lo valora así, y nosotros estamos convencidos de que esa misma dimensión la aportará a la Fiscalía General del Estado".

Gil Lázaro fue terminante al señalar que Cardenal ha sido elegido por su probada capacidad, que nadie ha podido poner en cuestión, ya que "a un profesional al servicio del Estado lo único que hay que exigirle no es cuál es el horizonte de su privacidad, sino que en su función de sericio al Estado cumpla fielmente y sin género alguno de otra influencia que no sea la del servicio al Estado, algo que tiene acreditado".

A su juicio, Cardenal ha demostrado, en una fiscalía como la del País Vasco, que presenta especiales dificultades por el terrorismo, su dedicación y profesionalidad a la hora de afrontar el principal cometido del ministerio público, la defensa de la legalidad.

Gil Lázaro consideró que no tiene fundamento la apreciación del PSOE y de IU de que las decisiones del onsejo de Ministros cambiando el fiscal general del Estado y aceptando el traslado de la fiscal María Dolores Márquez no contribuyen a zanjar la llamada crisis de los fiscales de la Audiencia Nacional.

En su opinión, esas decisiones corroboran "un principio que es básico en la vertebración del ministerio público, que es el de jerarquía".