El fiscal, en sus conclusiones provisionales, solicita además una multa de 15 millones de pesetas para los cinco inculpados, cuyas edades oscilan entre los 18 y los 24 años, en concepto de indemnización a los familiares del fallecido.

Para José Antonio Romero Ors, alias "Jaro", el fiscal pide 18 años de cárcel por el delito de homicidio consumado y de 10 por el de homicidio frustrado. Romero es considerado autor material del apuñaamiento de Rouquier.

Para otro de los jóvenes procesados, David Ventura, el fiscal pide 12 y 6 años, respectivamente, por cada uno de los dos delitos; para Jorge Esteve y Francisco Javier Calaf, las penas solicitadas son las mismas que las del anterior, mientras que para Lluís Calafell son de 7 y 1 años de prisión, al aplicársele el atenuante de minoría de edad cuando sucedieron los hechos.

En el relato del fiscal se explica que el 13 de enero de 1991 los cinco "boixos nois" se reunieron en el ba "Bogart", de Barcelona, y decidieron, a propuesta de Francisco Javier Calaf, alias "Lupito", "salir a escarmentar a algunos miembros de las Brigadas Blanquiazules" para vengar la agresión que había sufrido, semanas antes, Sergio Segarra, compañero de los acusados, por parte de los seguidores del Español.

Según las calificaciones, Romero iba armado con un machete y Esteve con una navaja poco antes de que agredieran a los dos simpatizantes del Español. Al llegar a la altura de la Avenida de Sarrià y Fry Luis de Granada, los cinco "boixos" bajaron del coche conducido por Calaf y persiguieron a Frédéric Rouquier y José María Arboleas.

El joven francés recibió dos puñaladas y una fuerte paliza, mientras que Arboleas, a quien también asestaron dos puñaladas en la espalda, pudo escapar y entrar en el hotel Meliá-Sarrià. Posteriormente los agresores huyeron, según el fiscal.