Así lo aseguró hoy el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que aseguró que el nuevo modelo de financiación local, que entrará en vigor en enero de 2003, está todavía abierto a los cambios que puedan introducirse durante la tramitación parlamentaria fruto de las negociaciones con la Federacion Española de Municipios y Provincia (FEMP).

egún Montoro, el nuevo modelo, que tiene como principal novedad la supresión del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) para el 92% de los contribuyentes, garantiza la suficiencia financiera de las corporaciones locales y aumentará su capacidad normativa sobre sus tributos, a la vez que refuerza el principio de solidaridad. Agregó que asegura a los ayuntamientos los recursos que necesitan, que en ningún caso serán inferiores a los que disponen actualmente.

Explicó que los municipios de más de 100.00 habitantes, capitales de provincia y de comunidad autónoma se financiarán, además de con los impuestos locales, de la participación en los grandes tributos del Estado (IRPF, IVA e Impuestos Especiales) y de un fondo complementario con cargo a los Presupuestos del Estado. La idea del Gobierno es que el 50% de la financiación proceda de los impuestos y el otro 50% de la subvención, aunque dijo que esos porcentajes se discutirán con la FEMP.

Los de menos de 100.000 habitantes se financiarán con los tribtos propios y con una transferencia del Estado adecuada a sus necesidades. Las aportaciones del Estado a los municipios se concretarán en un crédito ampliable ya recogido en los Presupuestos del Estado de 2003, cuya cuantía está sujeta a la negociación con la FEMP.

SUPRESION DEL IAE

La principal novedad del nuevo sistema de financiación local es la supresión del pago del IAE para todas las personas físicas y las empresas que facturen anualmente menos de un millón de euros, con lo que 2.118.863 contrbuyentes (el 92% del total de los que ahora lo pagan) dejarán de pagar este impuesto, con un ahorro medio, explicó el ministro, de 400 euros. Actualmente, la recaudación líquida de los ayuntamientos por el IAE asciende a 222.000 millones de pesetas.

El nuevo IAE recoge también la exención del pago del impuesto para las nuevas actividades durante su primer año de vida y la bonificación del 50% de la cuota durante los cinco años siguientes, dando la potestad a los ayuntamientos de que apliquen una bonifcación de hasta el 50% por creación de empleo.

Además, ya no se tendrá en cuenta el número de empleados para fijar la tarifa del IAE, para no penalizar el empleo, y sólo se tendrá en cuenta la cifra de negocios. Para las empresas que facturan más de un millón de euros al año (el 8%) y que seguirán pagando el IAE, suben las tarifas del impuesto, aunque Montoro no supo concretar cuánto pagarán de más estas empresas en su conjunto.

El ministro explicó que para estas empresas se ha procedido a una acualización del IAE, que estaba congelado prácticamente desde hace diez años, con lo que se había desnaturalizado la propia definición del impuesto al haberse desvinculado de la evolución económica de las empresas y de la marcha de sus beneficios.

Las empresas que destinen parte de su superficie a guardería para los hijos de empleados y de clientes y para servicios socioculturales verán reducida la cuota del impuesto, así como las que utilicen o produzcan energía renovable, ya que se da la posibilidadlos ayuntamientos de bonificarlas hasta en un 50% de la cuota del impuesto.

Otra de las novedades del borrador de reforma de las Haciendas Locales es la creación de una tarifa específica dentro del IAE para las empresas de telefonía móvil de 1,260,77 euros por cada mil abonados o fracción.

Además, la tasa del 1,5% de los ingresos brutos de facturación que ya existe por ocupación del dominio público se aplicará tanto a las empresas que usen redes propias como a las que empleen redes ajenas, lo qu de hecho supone incorporar a esta tasa a las empresas eléctricas usuarias de las redes.

VIVIENDAS VACIAS

El nuevo modelo de financiación local introduce también cambios en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el impuesto que más recaudación aporta actualmente a los ayuntamientos (supone el 15,6% de sus ingresos totales), seguido del IAE (el 6% de los ingresos). En concreto, se faculta a los ayuntamientos para aumentar hasta el 1,65% el tipo de gravamen a las vivientas que estén desocupadas, con e objetivo de que salgan al mercado.

La horquilla del tipo de gravamen de las viviendas de este impuesto no se modifica (entre el 0,4% y el 1,1%), pero se permitirá a los ayuntamientos diferenciar los tipos en función del uso de los inmuebles (vivienda, industria, comercio, etc.). Además, los ayuntamientos podrán aplicar bonificaciones de hasta el 90% de la cuota del IBI a las familias numerosas, medida que podrá beneficiar a más de 500.000 familias, según Montoro.

En relación con el Impuesto sobr Vehículos de Tracción Mecánica, conocido como impuesto de circulación, que supone un 5,8% de los ingresos totales de los ayuntamientos, se amplían las exenciones para los coches de discapacitados y se faculta a los ayuntamientos para que puedan aumentar hasta un 75% las bonificaciones a los vehículos que usan carburantes respetuosos con el medio ambiente.

El borrador de reforma de las Haciendas Locales introduce también algunos cambios en el denominado impuesto sobre plusvalías y en el Impuesto sobreConstrucciones, Instalaciones y Obras, que son impuestos voluntarios de los ayuntamientos; e incluye una regulación específica del catastro, que abre la posibilidad a los ayuntamientos de diferenciar los usos del catastro, de manera que puedan aumentar el de la vivienda y no el de la industria o viceversa.