Desde Badajoz, en el acto previo al arranque oficial de la campaña electoral, Feijóo instó de nuevo a “derogar el sanchismo en las urnas”. “Ni Pedro Sánchez ni los candidatos de Sánchez merecen el apoyo de los españoles”, sentenció el líder de la oposición en un discurso en el que empujó a un “cambio tranquilo” para dejar atrás la “política radical”.

“El cambio sereno, en mi opinión, exige poner sentido común a los despropósitos, exige reformas tranquilas frente al caos y exige unidad frente a la división”, enfatizó Feijóo al dirigirse a todos aquellos que anhelan “una alternativa fuerte, sólida, serena, tranquila y reposada” en sus territorios.

Ante el pistoletazo de salida de una campaña “muy intensa y también muy ilusionante”, Feijóo se refirió al momento “crucial” que tienen los españoles ante sí, dado que el 28 de mayo podrán adoptar “grandes decisiones”. Se trata, avisó, de elegir “frivolidad, populismo, radicalismo e independentismo o un cambio”.

“El cambio es volver a tomarnos España en serio”, proclamó el líder de la oposición, para a continuación advertir de que para seguir igual “hay decenas de papeletas”. Sin embargo, “hay una papeleta, la del PP”, para quienes desean ese “cambio sereno y tranquilo” que dé carpetazo a la política que divide, enfrenta y solo busca culpables en vez de soluciones.

BILDU

Feijóo resaltó que hay que “derogar el sanchismo de la misma forma que hemos derogado la ley del ‘solo sí es sí’”. Se despachó, en este punto, contra un Gobierno que “se apropia de las instituciones, cede a cualquier planteamiento independentista” o se “apoya” en Bildu, “un partido que lleva en sus listas 44 terroristas y siete condenados por delitos de sangre”.

Solo por esto, enfatizó Feijóo, “ningún socialista en Extremadura podría dar el apoyo al PSOE”. Es más, en palabras del presidente del PP, supone “un insulto a la democracia española” y a la “dignidad” del país que a estas alturas del siglo XXI ver listas electorales con personas que pertenecieron a una banda terrorista.

Al hablar de los “desmanes del sanchismo”, que son "interminables", el presidente del PP denunció que en el Ejecutivo central “legislan para favorecer la okupación ilegal”, que “nos endeudan hasta las cejas” o que “hemos llegado a que se pueda castigar más la violencia animal que la violencia de género”.

Tras hacer este análisis de la situación de España con “el sanchismo”, Feijóo subrayó que su deseo es convertirse “en el presidente de la gente”. “Me comprometo desde ya a que nunca jamás utilizaré un medio del Estado para hacer un acto del partido”, garantizó, y ante los extremeños prometió “un tren digno” si logra gobernar.

Feijóo también rescató su compromiso de impulsar un plan nacional del agua en el caso de ser presidente del Gobierno, además de criticar a Sánchez por el Consejo de Ministros extraordinario con medidas contra la sequía el mismo día que se pegan los carteles electorales. “No se toma a la gente en serio”, denunció, y aseguró que él no se dedicará “a tapar la crisis del agua en la campaña”.

SOCIOS

Ante el alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, exdirigente de Ciudadanos que se presenta ahora con el PP, Feijóo presumió de estar al frente de un partido unido que “no tiene más socios que las papeletas que salen de las urnas” y que “no tiene cuentas pendientes con nadie". En esta ciudad, recalcó, “hemos ganado mucho volviendo otra vez a unir todo el centro derecha y el centro reformista”.

Tras “unir” al partido, Feijóo avisó de que hay que mirar más allá para “unir a la nación española” en torno a los problemas de los ciudadanos. En su caso, a la candidata del PP a la Junta de Extremadura, María Guardiola, la definió como una mujer valiente, libre y que “no se conformará con los desprecios del sanchismo ni de nadie”.

Entre todos, destacó Feijóo, se logrará el cambio, pero alertó de que hay que “pelear” para atraer a los que votaban al PSOE porque “entendían que era un partido de Estado y ahora ven que sus socios van contra el Estado”, así como a quienes confiaron “de buena fe” en Sánchez y han visto traicionada su confianza.

Sin una mención expresa, Feijóo hizo hincapié en que también se necesita la confianza de todos aquellos que votaron a otros partidos “que decían que querían sumar con el PP y, después, cuando dividimos el voto nos dimos cuenta de que eso lo único que beneficiaba es que gobernara la izquierda”.

“Si esos quieren que gobierne el PP, la única fórmula seguro es votar al PP”, resaltó Feijóo, poniendo así sobre la mesa la advertencia que “lo demás no es seguro” y simplemente apuntala la posibilidad de que no gobierne este partido y no se produzca el vuelco. Para finalizar, habló de “ilusión” y más “ilusión”, pues eso es lo que percibe de cara al 28-M.