Durante su intervención en la trigésimo séptima reunión del Cercle d’Economía, que se convirtió en la primera comparecencia de Feijóo en Cataluña desde su elección como presidente del PP el pasado 2 de abril, avisó de que el Gobierno “está volviendo” a repetir "la misma equivocación” que España cometió en el pasado, y señaló que “la inestabilidad política” es “el mejor aliado” para acrecentar “la inestabilidad económica”.

“La política ilusoria que nos gobierna en estos momentos empieza negando las dificultades. No es la primera vez que nos ocurre en España y está volviendo a repetirse la misma equivocación. La realidad económica no tiene nada que ver con la irrealidad con la que el Gobierno quiere que veamos las cosa”, afirmó Feijóo.

Recordó entonces que España sufre una “inflación desbocada” y rechazó que esté “bajo control” solo porque haya bajado del 9,8% al 8% entre marzo y abril, y apuntó que la inflación subyacente aumentó en la última actualización. Insistió en que la subida del IPC no es causa de la guerra de Ucrania y se remitió a los meses previos al inicio del conflicto, cuando este indicador alcanzó el 7%.

Asimismo, tachó de “pírrico” el crecimiento del 0,3% que la economía española experimentó en el primer trimestre de 2022 y subrayó que las cuentas públicas “se han visto comprometidas en los últimos dos años”, periodo en el que la deuda pública aumentó en 200.000 millones de euros, según Feijóo.

Feijóo preguntó también de qué sirven los Presupuestos Generales del Estado vigentes si el Gobierno redujo hace una semana la previsión de crecimiento del PIB de España del 7% al 4,3%, “es decir, un 40% a la baja”; y calificó el cuadro macroeconómico remitido a Bruselas de "irreal" porque discrepa con la previsión de precios del gas natural y el petróleo, así como las estimaciones de la evolución de los tipos de interés, que están “desactualizadas”.

Por último, aseveró que cualquier previsión macroeconómica debe estar “marcada” por el “fin de la compra de activos del Banco Central Europeo que obligara a todos los gobiernos a dedicar una parte importante del presupuesto” para reducir su deuda pública, y lamentó que el Ejecutivo no rebaje el nivel de endeudamiento del Estado por debajo del 100% hasta después de 2025, a pesar de recoger en el plan un incremento de la recaudación de las arcas públicas.

“Es un diagnóstico fallido. Supone más carga para los ciudadanos y emprendedores, y no es el camino”, resumió Feijóo, quien apenas cinco minutos antes lamentó que el Ejecutivo recree “el paraíso terrenal de las sagradas escrituras donde la abundancia no conoce límites y cualquier deseo puede ser realizado”. “En su mundo nada es imposible”, ahondó.

PLAN ECONÓMICO DEL PP

Ante el planteamiento del Gobierno, Feijóo aprovechó su comparecencia ante los empresarios catalanes para exponerles el plan económico que remitió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hace justo dos semanas y que se basa en la “racionalización” del gasto burocrático del Gobierno, el “rediseño” de los fondos europeos, una serie de “reformas estructurales” para “consolidar” un “crecimiento sano” de la economía, y una bajada de impuestos “selectiva, inmediata y temporal” para “hacer frente al incremento masivo de los precios”.

En concreto, Feijóo propuso al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, una rebaja fiscal temporal orientada a las rentas bajas y medias que podría llegar a alcanzar un máximo de 10.000 millones de euros, a los que habría sumarle 4.900 millones adicional que irían destinados a incentivos ficales para “agilizar” la ejecución de los fondos europeos. No obstante, el PP no logró alcanzar ningún acuerdo con el Gobierno sobre este plan, aunque mantiene sus propuestas sobre la mesa.

“No se ha querido aceptar, ni en parte ni en nada. Se ha equivocado de aliados una vez más y creo que la mayoría de los ciudadanos no entienden por qué los grandes partidos no hablamos de las grandes cosas. A todos nos hubiese gustado que los dos principales partidos políticos, que están llamados a la alternancia, nos hubiésemos puesto de acuerdo para sacar nuestro país de la crisis, cada vez más profunda”, declaró Feijóo, quien pidió “poner remedio” a los “desencuentros”.

TENSIONES POLÍTICAS

Antes de este mensaje al Gobierno, el presidente del PP afirmó que la “política y la economía son las dos caras” del “deseo” de lograr “la estabilidad”, y advirtió que la “inestabilidad” en algunas de estas dos facetas es incompatible con la estabilidad general.

Sin embargo, avisó de que España sufre tanto inestabilidad política, como económica y, “en ambos casos, cada vez con mayor virulencia”, todo ello en un “clima en el que reina el conflicto y la trinchera”.

Mostró su preocupación por “las tensiones partidistas que se perciben en el seno del actual gobierno central” y tildó de “lamentable” que se rompan “los consensos amplios básicos que siempre han dado los mejores resultados” en España, porque "alimenta la inestabilidad política y es el mejor aliado para acrecentar la otra inestabilidad, la económica”.