La organización señaló que, “para poder avanzar”, es necesario primero consolidar “un mundo inclusivo donde las mujeres puedan desarrollar todo su talento y la corresponsabilidad sea una cuestión prioritaria y la brecha económica no siga penalizando a las mujeres”.

Fedepe ensalzó los cambios realizados en los últimos años, como “la triplicación del porcentaje de mujeres en los consejos de administración de las empresas del Ibex35, el rechazo de los abusos sexuales o de poder y la rotura de los techos de cristal en la cultura o el deporte”.

No obstante, la federación denunció que existen aún desigualdades como el reparto en las grandes empresas o que “haya seis compañías cotizadas del resto del mercado continuo sin representación femenina en su máximo órgano de dirección”. En la misma línea, reprochó la precarización de los sectores económicos que se feminizan, lo que conduce al emprendimiento “por necesidad” entre las mujeres.

Por ello, Fedepe instó a la sociedad a permanecer alerta con el objetivo de “defender lo conseguido y no desandar el camino recorrido en el impulso del liderazgo femenino”, además de “corregir los desequilibrios económicos y laborales que sitúan a las mujeres en mayor precariedad y empobrecimiento”.