En este encuentro, en el que han participado cerca de 400 familias, se ha analizado la situación que viven las personas con síndrome de down en el ámbito educativo, laboral y personal y se han planteado las posibles soluciones para paliar los problemas de esta enfermedad.

En primer lugar, los padres demandaron una información adecuada sobre el síndrome de down desde el momento en que ls expertos lo detectan. En este sentido, los familiares aseguraron echar en falta una mejor preparación de los profesionales para saber cómo y cúando dar la noticia sobre la enfermedad del bebé.

En el ámbito del empleo, los padres de enfermos reivindican el cumplimiento de la ley en cuanto a la reserva del 2% de empleos para discapacitados en la empresa ordinaria, así como la adaptación de las convocatorias públicas de empleo a personas con retraso mental.

Por último, el encuentro trató aspectos e la vida personal de los enfermos, su necesidad de autonomía e independencia y su derecho a la sexualidad, un asunto en el que los padres pidieron más ayuda para saber cómo afrontar esa etapa de la vida de sus hijos sin riesgos como abusos o embarazos no deseados.