La nieta del maestro, Nieves Galindo, aseguró hoy, en declaraciones a Servimedia, que tanto ella como los familiares de otro de los enterrados en la fosa común, el banderillero Francisco Galadí, están preparando ya la documentación necesaria para pedir la exhumación, a primeros de septiembre, ante los juzgados de Granada.

Galindo señaló que su familia y la Galadí llevan muchos años tratando de ponerse en contacto con los descendientes del poeta, en concreto con la sobrina nieta de éste, Laura García Lorca, pero que los familiares "no atienden a razones" y están poniendo "muchas complicaciones".

Indicó que, incluso, llegaron a concretar una reunión para este mes de agosto con Laura García Lorca, pero que, finalmente, fue anulada por parte de los familiares del poeta.

La nieta del maestro enterrado con Lorca quiso dejar claro que su intención no es la de llevarse los restos de su abuelo para darle sepultura en algún otro lugar, sino que lo que quiere es, simplemente, "que se reconozca que está ahí y se ponga una lápida" en el lugar donde se encuentra la fosa común.

"Lo hago por mi padre, ya que murió sin haber recuperado los restos de mi abuelo", explicó Galindo, quien añadió que los familiares del banderillero Galadí están de acuerdo en que se debería reconocer los cuerpos y dignificar la sepultura a través de una lápida o un pequeño monumento.

Afirmó que desde que inició su lucha por recuperar los restos de su abuelo nunca ha recibido ayuda alguna por parte de las administraciones, e indicó que la Universidad de Granada se ha prestado ya a realizar la exhumaciones y el análisis de ADN de los restos de forma gratuita.

Por último, Galindo señaló que ha sido imposible ponerse en contacto con los descendientes de la cuarta persona que fue fusilada y enterrada en la fosa común, el también banderillero Joaquín Arcollas, y explicó que "o no tiene familia o no se han interesado por él".

EXHUMACIÓN POSIBLE

Por su parte, el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, Emilio Silva, aseguró hoy que es posible exhumar varios cuerpos de una fosa común y dejar los demás cadáveres en su lugar, y que "no son incompatibles" los deseos de la familia del maestro y del banderillero de reconocer los cuerpos con el deseo de los descendientes de Lorca.

Señaló que un equipo argentino, pionero en este campo, ya ha realizado esta práctica, es decir, la exhumación selectiva de cuerpos, en varias de las fosas comunes que la represión militar dejó en el país sudamericano.