La organización contesta así al magistrado, quien, en el auto por el que se declaró competente para investigar los crímenes de la Guerra Civil y el franquismo, pidió al Ministerio del Interior la identificación de los máximos dirigentes de la Falange Española entre el 17 de julio de 1936 y el 31 de diciembre de 1951.

Garzón necesita la identificación de los máximos responsables de la organización "para acordar lo necesario sobre la imputación y extinción, en caso de fallecimiento, de su responsabilidad penal", según señalaba el auto dictado el pasado 18 de octubre.

Además, en el escrito dirigido a Garzón, el actual jefe Nacional de Falange Española de las JONS, Diego Márquez Horrillo, señala que él mismo fue dirigente de la organización en la posguerra y a lo largo de la dictadura, por lo que se pone a disposición del magistrado "para desmentir todas las imputaciones que se hacen contra nosotros".

Por otro lado, el escrito señala que en Madrid hubo "miles" de desaparecidos durante la guerra, y a este respecto indica que uno de los máximos responsables de la Junta de Defensa de la capital era Santiago Carrillo, "quien está vivo y sí puede ser citado para que responda de aquellos verdaderos crímenes contra la humanidad".