Según afirmaron desde la Fadsp, “entendemos que se trata de una excelente noticia el que se acabe con la precariedad de estos trabajadores sanitarios, muchos de los cuales encadenaban contratos o tenían una situación temporal durante más de 10 años”.

Sin embargo, esta federación advirtió de que esta consolidación laboral “no supone un solo trabajador más en el sistema sanitario, por lo que continuaran las carencias en personal que venimos señalando reiteradamente y que impiden a nuestra Sanidad Pública responder adecuadamente a las necesidades de salud de la población”.

De hecho, subrayó que solo la Atención Primaria precisa de 8.000 médicos y médicas, 15.000 profesionales de enfermería y 10.000 en las unidades administrativas para responder a la demanda asistencial. Unas carencias que también existen en la Atención Especializada.

La Fadsp señaló que se ha llegado a esta situación “por el incumplimiento sistemático por parte de las administraciones sanitarias de realizar concursos periódicos para cubrir las vacantes que habían llegado a provocar que el 41,9% de los trabajadores sanitarios no eran fijos en 2002 y que esta regularización ha venido obligada por una sentencia de los tribunales de la Unión Europea”.

Por ello, esta federación puntualizó que “no se entiende bien el triunfalismo que se exhibe en el anuncio de esta consolidación de empleo. Necesitamos un compromiso más decidido con la Sanidad Pública, que pasa necesariamente por aumentar sus plantillas. Los próximos presupuestos son el momento de hacerlo realidad”.