Estos aviones han realizado patrullas aéreas de combate para e control del espacio aéreo y la prohibición de los vuelos no autorizados por Naciones Unidas; de apoyo aéreo cercano a los cascos azules y acciones de ayuda humanitaria, y ataques aéreos -como integrants de la fuerza multinacional- a objetivos terrestres determinados por la ONU, entre los que se incluía la supresión de defensas enemigas.

Los F-18 realizaron 1.800 misiones y 5.300 horas de vuelo en cielos de Bosnia, durante el año que han participado en la operación Deny Flight, para lograr la paz en Bsnia-Herzegovina y hacer cumplir las resoluciones de Naciones Unidas.

Por su parte, los Hércules C-140 españoles efectuaron 350 reabastecimientos en 1.300 horas de vuelos, en las que suministraron más de cinco millones de litros de combustible, de los que el 20 por ciento fueron para aviones de EEUU, Reino Unido y Francia.

El destacamento Icaro del Ejército del Aire en la operación Deny Flight, que lleva operando desde el 1 de diciembre de 1994, está integrado por los F-18, los Hércules C-130, piotos, mecánicos y personal de apoyo del Ala 31 de la base aérea de Zaragoza, que se alternan con los de Ala 12 de Torrejón de Ardoz (Madrid).

El Ejército español del Aire también interviene en esta operación con un C-212 Aviocar del Ala 37 (base aérea de Villanubla, Valladolid) que desde Vicenza (Italia) realiza misiones de transporte para la V Fuerza Aérea Táctica de la OTAN.