La decisión de celebrar una consulta interna, refrendada por la Asamblea en una votación a mano alzada, se produjo ante las críticas de varios sectores a la excesiva "dependencia" de Madrazo respecto a los postulados nacionalistas, y coincide con la propuesta del Partido Comunista de Euskadi (EPK) de someter la postura de la formación a una consulta entre los militantes.

Por otra parte, Madrazo resultó reelegido como coordinador general de Ezker Batua con el respaldo del 78,72% de los votos -casi un 16 por ciento más que el obtenido hace cuatro años- después deque el parlamentario vasco Oskar Matute decidiera retirar su candidatura alternativa, según informó el partido en un comunicado.

Previamente a la designación del responsable de Ezker Batua, la Asamblea General eligió al Consejo Político que dirigirá la formación los próximos cuatro años. La lista de Madrazo obtuvo 366 votos de un total de 478 electores, lo que representa un 76,56 por ciento y con lo que contará con 77 miembros en el Consejo.

La candidatura de Oskar Matute recabó 108 apoyos (22,59 por ciento), con lo que contará con 23 integrantes en el máximo órgano entre asambleas de EB.

Madrazo, en su intervención final tras ser reelegido, manifestó el "honor, afecto y sentimiento de responsabilidad" que le embarga por haber sido designado para "coordinador los esfuerzos de cerca de dos millares de afiliados".

En su discurso, Madrazo llamó al "consenso" y a la "unidad", ya que, según afirmó, "todas y todos somos imprescindibles para sacar adelante el proyecto de Ezker Batua".

"A partir de hoy sólo hay una lista, sólo hay una dirección, la de todas y todos, la de Ezker Batua", agregó el coordinador general de la formación.

CAMBIO ESTATUTARIO POR MONDRAGÓN

Además, en este encuentro se decidió modificar las competencias de las asambleas locales en aquellas cuestiones que transciendan el ámbito local y puedan tener un reflejo en el conjunto de la organización de EB.

Así, a partir de ahora, se intentará alcanzar "un consenso entre la asamblea local y la Presidencia de Euskadi" y, en caso de que no se diera ese consenso, será la Presidencia la que tomará la decisión última, recabando como mínimo el 70 por ciento de apoyos.

Esta reforma se acordó tras la polémica decisión de los dos concejales de Ezker Batua en Mondragón de no apoyar la moción de censura contra la alcaldesa, de ANV, Inocencia Galparsoro, por no condenar el asesinato de Isaías Carrasco.