Úriz estaba citada a las diez y media de la mañana en la Cámara Alta, que ya la había llamado a comparecer con anterioridad, pero que no consiguió notificarle la citación y tuvo que hacerlo finalmente mediante un edicto.

En este caso, la exmujer de García sí acudió, pero irreconocible a primera vista, ya que llevaba la cabeza tapada con un pañuelo que le tapaba toda la cabeza, excepto la cara, a lo que se sumaban unas gafas negras de gran tamaño.

El hecho de que la apariencia de la compareciente no coincidiera con las fotos que de ella pueden verse en medios de comunicación llevó a la senadora de UPN María Caballero a pedir que se acreditase la identidad de la citada.

NO DECLARA

Esto llevó al presidente de la comisión, Eloy Suárez, a suspender la sesión unos minutos para consultar con los letrados si podía confirmarse la identidad de la exmujer de García. Tras unos minutos, Suárez indicó que la compareciente había sido identificada a la entrada del Senado, por lo que había comprobado que era ella.

Sin embargo, Caballero, al tomar la palabra, se quejó de que no era posible presentarse en una comparecencia parlamentaria como lo hacía la exmujer del exasesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos.

Seguidamente, Úriz comunicó que no respondería a las preguntas porque los hechos sobre los que le podían preguntar los senadores eran “idénticos” a los que son investigados en el sumario de la Audiencia Nacional en el que ella y su exmarido están imputados.