Según informó hoy Carrefour, estos trabajadores llevarán a cabo en cada uno de los 113 hipermercados Carrefour y en el resto de centros de la cadena un minucioso chequeo de todos los elementos afectados por el cambio al euro.

En cada una de las tiendas se realizará u mínimo de 200 ventas reales de lotes de productos, cuyo pago se efectuará teniendo en cuenta todas las combinaciones posibles: pago en pesetas, pago en euros, con tarjeta de compra o parte en pesetas y parte en euros.

Carrefour ha invertido 12 millones de euros (unos 2.000 millones de pesetas) en la adaptación y la formación de la plantilla con motivo de la entrada en circulación de la nueva moneda.

Cada establecimiento Carrefour dispondrá de un "stand" sobre el euro, con el fin de poder resolve las dudas que tengan los clientes sobre la nueva moneda. Además, distribuirá cerca de un millón de folletos informativos acerca del euro.

El etiquetado de todos sus productos está ya en euros, con su referencia en pesetas, algo que se mantendrá, por lo menos, hasta julio del próximo año. Carrefour se comprometió, además, a aplicar el redondeo sin aumentar los precios y, en caso de error desfavorable al cliente, a devolver 10 veces la diferencia encontrada.