Para Gil Lázaro, "quienes se atreven a llamar asesinos a los demócratas y les amenazan con tiros para todos no son más que unos esquizofrénicos a los que sólo les mueve un afán salvaje de violencia para ocultar en él su falta absoluta de respeto a la libertad y a la convivencia de los vascos".

Gil Lázaro afirmó que "estos voceros del asesinato deben tener muy claro que los demócratas no tenemos miedo a sus cobardes bravuconadas y que ese chantaje mafioso al qe sistemáticamente recurren no va a alterar, en absoluto, nuestra capacidad de hacer frente a su alternativa del terror desde el más escrupuloso atenimiento al Estado de derecho".