La AVT pidió al magistrado las comparecencias de Robles y Vera tras la declaración que el pasado día 17 efectuó el dirigente de LAB ante el juez como imputado, en la que aseguró que entre 1990 y junio de 1996 intermedió entre el Gobierno y los dirigentes de ETA que residen en Santo Domingo con el consentimiento de ambas partes.

Según Díez Usabiaga, dicha interediación, que comenzó desde el proceso de Argel, consistió en transmitir posturas y mensajes entre ambas partes y concretó que Vera fue una de las personas del Ministerio de Interior que gestionó sus viajes a Santo Domingo.

Tras esta comparecencia, el abogado de la AVT, Pedro Cerracín, que acusa a Díez Usabiaga de pertenencia a ETA, anunció que pediría al juez que tomase declaración a los responsables del Ministerio del Interior en la época de los hechos, incluyendo a los actuales de quienes, sin embago, el dirigente sindical no dijo que le hubieran facilitado infraestructura para sus contactos con los etarras de Santo Domingo.

Por su parte, el abogado de Díez Usabiaga, Iñigo Iruín, dijo que solicitará el archivo de las actuaciones, dado que, a su juicio, no existe ningún elemento nuevo contra su defendido desde que la causa contra él fuera reabierta por Garzón meses después de que la Sala Segunda del Tribunal Supremo la archivara por falta de pruebas en noviembre de 1995.

Además, de esas comarecencias, la fiscalía también ha solicitado al magistrado que tome declaración como testigos a las personas que acompañaron a Díez Usabiaga en dichos contactos, entre ellos el dirigente de HB José Luis Elkoro.