Según el escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía de la Audiencia Nacional considera probado que Miguel Angel Gil Cervera actuaba a las órdenes de Juan Lorenzo Lasa Michelena, alias "Txikierdi", quien a finales de 1983 ordenó el mencionado atentado.

El atentado debía ser llevado a cabo por José Miguel Latasa Guetaria, alias "Fermín", en unión de "Kurika", quien en aquellas fechas prestaba su servico militar en dicho acuartelamiento.

Así, el 15 de diciembre de 1983, Miguel Angel Gil Cervera esperó a Latasa para facilitarle la entrada al recinto. Ambos entraron con uniforme militar e intimidaron con una pistola al soldado Miguel Angel Cuartero y se apoderaron de su metralleta. Acto seguido le dejaron amordazado y maniatado.

Posteriormente, amos se desplazaron hasta el garaje, donde Miguel Angel Gil Cervera tenía un Renault 12 con matrícula falsa y las bombas que había podido introducir en el recinto militar. Así, se dirigieron al edificio principal, donde colocaron cuatro artefactos explosivos en las cocinas y en el Hogar del Soldado.

La explosión de tres de los artefactos produjo lesiones a cuatro militares, así como daños en la estructura de los edificios. La cuarta bomba fue desactivada después por la Guardia Civil.

Tras la explosón, tanto Miguel Angel Gil Cervera como Latasa huyeron en el Seat 131 en el que se había desplazado este último para perpetrar el atentado.

Según el escrito de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, "los daños personales no fueron mayores porque, después de ser atacado, el soldado Cuartero logró liberarse de las ataduras, avisó a sus jefes y el acuartelamiento pudo ser desalojado".

Por su participación en estos hechos, la Fiscalía pide que Gil Cervera sea condenado a 10 años de cárcel por detenció ilegal, único delito por el que Francia concedió su extradición en relación a este caso.